Elon Musk, dueño de empresas como Tesla, SpaceX o X (la red social antes conocida como Twitter), ha mostrado siempre su ambición por ir un paso más allá. Uno de los proyectos que ha defendido y tiene en cartera es el del desarrollo de los túneles de vacío.
Este transporte, conocido como hyperloop, se basa en una tecnología que crearía túneles sin aire. Los trenes no se enfrentarían a ninguna resistencia del aire dentro del túnel, lo que les permitiría alcanzar velocidades más altas que los trenes no convencionales.
Tal y como recoge la revista Newsweek, recientemente ha vuelto a salir a la palestra la posibilidad de crear uno de estos túneles bajo el océano Atlántico para unir Nueva York y Londres en un viaje que duraría menos de una hora.
Este tren submarino alcanzaría la prodigiosa velocidad de 4.800 kilómetros por hora, pero el principal obstáculo del proyecto serían los enormes costes para llevarlo a cabo.
Y es que poner en marcha este proyecto tendría un coste estimado de cerca de 20.000 millones de euros. Sin embargo, explica Newsweek, los avances en la tecnología de los tubos de vacío han hecho que el concepto sea más viable.
Sin embargo, todavía no existe un diseño definitivo del túnel. Varias propuestas sugieren un túnel bajo el fondo del océano, mientras que otras sugieren construirlo sobre pilotes. Un diseño incluso propone que el túnel flote, sujeto en su lugar por cables sujetos al fondo del océano.