La basura espacial engloba a cualquier pieza o resto dejado por el ser humano en el espacio. Estos desechos viajan a velocidades extremadamente altas y permanecen sobre la atmósfera de la Tierra durante años hasta que se descomponen, salen de órbita, estallan o chocan con otros objetos, creando así más fragmentos de basura y poniendo en peligro las misiones espaciales o laboratorios orbitales, como es el caso de la Estación Espacial Internacional (ISS, por sus siglas en inglés).
Dicha infraestructura mencionada tuvo que maniobrar hace dos años porque un trozo de residuo espacial —de origen ruso— rozó la Estación y, desafortunadamente, la ISS ha tenido que volver a maniobrar con "algunas acciones evasivas" para esquivar un trozo de basura espacial "potencialmente peligroso".
Así fue la maniobra de la ISS para esquivar la basura espacial
La nave de carga rusa Progress, acoplada a la Estación Espacial Internacional, encendió sus propulsores durante cinco minutos y medio para elevar la órbita del laboratorio y proporcionar un margen de distancia adicional, de esta manera, la ISS evitó el choque de un trozo de escombro procedente de un satélite meteorológico de defensa que se desintegró en 2015.
La NASA detalla en su blog oficial que "la maniobra predeterminada para evitar escombros (PDAM, por sus siglas en inglés) se llevó a cabo en coordinación con la NASA, Roscosmos y otros socios de la Estación Espacial". Además, "sin la maniobra, los funcionarios de balística estimaron que el fragmento podría haber llegado a unos cuatro kilómetros de la Estación".
Existe una alternativa para evitar la basura espacial
Airbus lanzó, a finales de 2023, un aparato para combatir la basura espacial peligrosa.
Detumbler, que así se llama el invento, utiliza la amortiguación magnética al acoplarse a los satélites cuando se aproximan al final de su vida útil, pesa 100 gramos y está equipado con una rueda de rotor central e imanes que interactúan con el campo magnético de la Tierra, así pues, evita movimientos no deseados cuando los satélites entran en la atmósfera y empiezan a girar sin control.
Asimismo, actúa como si se tratase de una brújula para el satélite y ralentiza los movimientos de este gracias a su rotor, que manda corrientes eléctricas para provocar una fricción.