El efecto en el cerebro de comer una manzana al día

La fruta es esencial en una alimentación saludable y variada, aporta numerosos beneficios a la salud, vitaminas, minerales y también fibra, por eso siempre se recomienda tomarla de la forma más natural posible. En España la naranja es la fruta más consumida, pero existen frutas de todo tipo, más dulces y más ácidas, hidratantes y refrescantes, algunas de ellas son ideales para después de entrenar, otras vienen genial si queremos tomarlas a mitad del día y no estamos en casa, por lo que es raro no encontrar alguna que sea de nuestro gusto.

Aunque se recolectan entre agosto y octubre, se pueden encontrar manzanas en el mercado durante todo el año, tal vez por eso quedan eclipsadas por otras frutas que solo encontramos a finales de verano o que en otoño viven su mejor momento, haciendo que las manzanas no reciban el reconocimiento que merece. Cómodas de transportar, aportan tantos beneficios como otras frutas y además resultan saciantes, eso sin mencionar los efectos que tiene sobre nuestro cerebro tomar una manzana al día.

El efecto en el cerebro de comer una manzana al día

Por mucho que se considere que todas las frutas son saludables, no todas tienen los mismos beneficios para la salud y este aspecto, las manzanas se han convertido en una de las que no puede faltar en nuestra dieta, por lo mucho que aportan a quien las consume. Incluir en nuestras rutinas de alimentación una manzana diaria puede aportar grandes ventajas gracias a la gran cantidad de fibra que contiene, entre otras cosas.

La nutricionista Emily Hammon afirma que uno de los muchos beneficios que tiene para la salud comer manzanas con regularidad es también uno de los más desconocidos para la gente en general, que no suele ser consciente de cómo tomar una manzana al día puede favorecer la salud cerebral, algo que achaca en parte a la quercetina que contienen. “Se sabe que la quercetina protege las células cerebrales y disminuye el riesgo de deterioro cognitivo asociado con el envejecimiento”, explica la experta en alimentación. “Puedes tomar una medida proactiva para favorecer la salud cerebral incluyendo manzanas en tu dieta”.

La quercetina tiene efectos antioxidantes y antiinflamatorios y puede ayudar a prevenir y tratar enfermedades crónicas. Tiene muchos efectos positivos, mejora de la función inmunológica y previene enfermedades cardiovasculares, además, puede ser útil para aliviar los síntomas de alergias estacionales.

Otros beneficios de esta fruta

Además de cuidar nuestro cerebro, las manzanas también han demostrado ser beneficiosas para otros muchos aspectos de nuestra salud, por ejemplo, gracias a sus grandes cantidades de carotenoides y flavonoides fortalecen el sistema inmune. Sus distintos tipos de fibra ayudan a resolver problemas intestinales y el dolor de estómago, sus polifenoles ayudan a prevenir y controlar la diabetes tipo 2.

Gracias a la pectina, disminuye la absorción de grasas, lo que protege frente a enfermedades cardiovasculares, las manzanas también ayudan a evitar las caries, porque aumenta la producción de saliva en la boca, lo que reduce la proliferación de bacterias. Evidentemente, el consumo de manzanas no hace milagros ni evita enfermar, pero puede ayudarnos a cuidarnos un poco más, siempre que las tomemos en el marco de una dieta variada. Además, en algunos casos y con algunas variedades de manzanas, su consumo no es demasiado recomendable, como es el caso de las más ácidas y las personas con problemas gastrointestinales y úlceras.