La seriedad que reflejan sus ojos verdes no hace justicia a su cariño y buenas formas. Delaossa es uno de los raperos - o músicos - más grandes de la última década, pero esta vez no ha venido como su alter ego de gafas Tom Ford y cadenas doradas, sino como Daniel Martínez. Más que como quien es, como quien ha conseguido volver a ser.
Tras varios éxitos de proporciones bíblicas (Veneno, Un perro andaluz, Ojos verdes), este rapero de treinta y dos años oriundo de El Palo, Málaga, decidió desaparecer durante todo 2024. ¿El motivo? Sanar, construir, edificar; también soltar, olvidar, dejar ir. Volver, incluso.
El éxito lo sumergió en un círculo de malas influencias y vicios que debía dejar atrás cual lastre de las pesadas lanchas que cruzan el Estrecho, por lo que decidió enfocarse en estar bien y curar. Más de 1000 horas de terapia, asegura Daniel con la serenidad de quien se sabe satisfecho, que ha hecho en todo 2024.
Ahora, con la cabeza en paz y el amor por la música inundándole otra vez las vísceras, ha vuelto con Nueva Season, tema que narra dónde ha estado todo este tiempo y nos sirve de preámbulo para La Madrugá, proyecto del que sus fans más acérrimos ya han oído hablar y cuya historia contará en esta entrevista al calor del sol cariñoso que se masca en la azotea de 20Minutos:
