El futuro deportivo de Ilia Topuria sigue en el aire. Pese a que los deseos del excampeón del peso pluma son claros y que ya hay conversaciones con Makhachev, todavía no hay nada seguro. Es más, el panorama del hispano-georgiano se ha venido a complicar después de UFC 313 donde otro peso ligero, Justin Gaethje, volvió a brillar en el octágono.
Gaethje venía de ser noqueado por Max Holloway en UFC 300, pero se impuso a Fiziev por decisión unánime. Esta victoria fue suficiente para que Dana White, presidente de la compañía, dijera en rueda de prensa que podría darle opciones por el cinturón: "Sigue en el puesto número tres de mejores pesos ligero del mundo. Las posibilidades de que consiga la oportunidad de pelear por el título son bastante buenas".
Esto no es bueno para Topuria. Si Dana White le diera la pelea de Makhachev al estadounidense, el hispano-georgiano se quedaría en un limbo. Todavía podría hacer alguna pelea importante que podría aumentar su caché y que le habilitaría el camino al cinturón, pero si perdiera ese combate se quedaría en una situación complicada. Esta pelea podría ser la despedida de Dustin Poirier, un auténtico mito de UFC.
Justin Gaethje, por tanto, se ha interpuesto en la carrera de Topuria y esto es especialmente problemático porque es uno de los luchadores favoritos de Dana White y del público estadounidense. A igualdad de condiciones puede ser que UFC barra para casa, forzando a Topuria a tener que remar otra vez para conseguir una oportunidad de campeonato.
El estadounidense es uno de los luchadores que más espectáculo ha dado en los últimos años en la liga estadounidense de MMA. Sus peleas muchas veces se convierten en thrillers en los nunca se sabe bien quién ganará. Este modelo “Rocky” le ha hecho llevarse innumerables bonos y “peleas de la noche”.