La Unión Internacional de Telecomunicaciones (ITU, por sus siglas en inglés) y el Comité Internacional de Protección de Cables (ICPC, por sus siglas en inglés) han creado un organismo asesor para proteger a los cables submarinos de futuros ataques.
Esta noticia se ha dado a conocer tras la reciente rotura de un cable de telecomunicaciones, a causa de "una acción híbrida", que conectaba Alemania y Finlandia en el mar Báltico; aunque, poco después, surgieron las sospechas de que el responsable de la rotura fue un buque chino. Sin embargo, mientras la situación se aclara y para evitar situaciones similares a esta, ambos organismos han anunciado dicho consejo que está formado por 40 miembros —incluidos ministros, jefes de autoridades reguladoras, ejecutivos de la industria y expertos de alto nivel— para garantizar la reparación de los cables submarinos y minimizar el riesgo de daños.
Doreen Bogdan-Martin, Secretaria General de la ITU, afirma en un comunicado que "los cables submarinos transportan más del 99% de los intercambios de datos, por lo que su resiliencia es un imperativo mundial. El Órgano Consultivo movilizará a expertos de todo el mundo para garantizar que esta infraestructura digital siga siendo resiliente frente a desastres, accidentes y otros riesgos".
Además, "esta iniciativa subraya el compromiso de la comunidad global de fortalecer estas redes y avanzar en la cooperación internacional para la resiliencia digital", agrega Sandra Maximiano, Presidenta del Consejo de Administración de la Autoridad Nacional de Comunicaciones de la República de Portugal (ANACOM, por sus siglas).
La importancia de los cables submarinos
Los cables submarinos forman "la columna vertebral de las comunicaciones globales", transportando la mayor parte del tráfico de Internet del mundo y posibilitando servicios en todo el planeta. Además, pueden transmitir grandes cantidades de datos gracias a la tecnología de fibra óptica, que nos permite acceder a Internet desde cualquier punto de la Tierra.
Pero, desafortunadamente, los daños a los cables submarinos no son poco comunes, ya que, cada año, se producen un promedio de 150 a 200 averías en todo el mundo y se requieren alrededor de tres reparaciones de cables por semana, según ICPC.
Las principales causas de estos daños incluyen la actividad humana accidental, como la pesca y el anclaje, junto con los peligros naturales, la abrasión y los fallos de los equipos.