Han pasado solo tres meses desde que la vida de David Coote cambió por completo: fue entonces cuando un vídeo suyo insultando a Jürgen Klopp, exentrenador del Liverpool, salió a la luz, en lo que sería solo el inicio de su final como árbitro de la Premier League, pues poco después vería la luz otra grabación suya consumiendo cocaína antes de dirigir un partido de la Eurocopa 2024. Ahora, el excolegiado ha hablado por primera vez en una entrevista en la que ha revelado que es gay y que ocultarlo le ha "llevado a una serie de malos comportamientos".
El que fuese el encargado de dirigir hasta 100 partidos de la liga inglesa se ha abierto en canal en una entrevista en The Sun: "Sentí mucha vergüenza durante mi adolescencia en particular. No hablé de ello con mis padres hasta que tenía 21 años y no se lo dije a mis amigos hasta que tenía 25. Mi sexualidad no es la única razón que me ha llevado hasta esto, pero no estaría contando toda la verdad si no dijera que soy gay y que he sufrido mucho escondiéndolo".
Coote, suspendido en octubre después de que aparecieran imágenes suyas llamando "gilipollas" y "arrogante" a Klopp y despedido el pasado mes de diciembre de manera definitiva, ha explicado que escondió "sus emociones cuando era un joven árbitro y también su sexualidad". "Una buena cualidad como árbitro, pero terrible como ser humano, y eso me ha llevado a una serie de malos comportamientos", señala.
"No me reconozco en el vídeo de la cocaína", confiesa el exárbitro sobre ek vídeo en el que aparece esnifando un polvo blanco a través de un billete enrollado. "No puedo hacerme eco de cómo me sentía entonces, pero ese era yo. Estaba luchando con el horario y no había oportunidad de parar. Así que me encontré en esa situación, escapando".
Respecto al consumo de drogas, Coote explic que "era una de las vías de escape que tenía", pese a que pasó "largos periodos" sin recurrir a ello. Necesitaba "escapar del estrés, del trabajo", explica, al mismo tiempo que reconoce que le da "mucha vergüenza" decir que tomó "ese camino".
El excolegiado, además, ha desvelado que recibió amenazas de muerte por sus decisiones sobre el césped: "He recibido mensajes de hinchas furiosos que esperaban que hubiera tenido un accidente de camino a casa después de un partido. He luchado y he intentado superarlo a mi manera y he tomado malas decisiones al hacerlo".
En un comunicado emitido este lunes, Coote aseguró estasr atravesando "uno de los periodos más difíciles" de su vida, y asumió "toda la responsabilidad" por sus actos, "que estuvieron muy por debajo de lo que se esperaba" de él". "Lo siento de veras por cualquier ofensa causada por mis acciones y por el foco negativo que han puesto en el deporte que amo", ha lamentado.
"Espero que la gente entienda que fueron momentos privados tomados en momentos muy bajos de mi vida. No reflejan quién soy hoy ni lo que pienso. Ahora me concentro en seguir dando prioridad a mi salud mental y a mi bienestar. Espero que mis experiencias, tanto dentro como fuera del campo, puedan utilizarse en el fútbol en algún momento del futuro", concluyó el trencilla.