A medida que se acerca el cierre de la primera central nuclear, la de Almaraz, según el plan establecido, son numerosas las voces que se alzan para pedir una extensión de su vida útil, que se suman a unos aires en la UE orientados a impulsar también la energía nuclear para asegurar la soberanía energética europea. Al propio sector y al PP y comunidades populares como Extremadura y Madrid, este miércoles se sumó también UGT, el sindicato más cercano al PSOE, que también reclamó al Gobierno revisar la caducidad 40 año que tiene la central extremeña. Sin embargo, para la vicepresidenta tercera, ministra para la Transición Ecológica y máxima responsable del dossier nuclear en le Gobierno central, Sara Aagesen, nada ha cambiado. Existe, ha dicho, un "diálogo abierto" con las eléctricas propietarias de las centrales, en el que se habla de impuestos pero segura que las compañías no le han planteado nada relativo a modificar el calendario de cierre.
"De momento, nada sobre el calendario", ha contestado Aagesen este jueves a la pregunta de qué le plantean Iberdrola, Endesa y Naturgy, con las que ha asegurado que "como siempre" mantiene un "diálogo abierto" sobre esta y otras cuestiones, como sobre "cuál es la fiscalidad, dónde estamos, cuáles son los retos, cómo hacemos para llevar el despliegue de renovables". "Hay un debate abierto muy interesante", ha remachado, en el que asegura que las propietarias no le han pedido extender la vida útil de las centrales que en público sí ven conveniente.
Más inversiones en redes, aún sin cuantificar
Aagesen ha hecho estas declaraciones durante una jornada en la que se está reuniendo con medio centenar de asociaciones del sector energético y de consumidores, para presentarles los planes de su Ministerio y conocer su punto de vista sobre competitividad y asequibilidad de los precios de la energía, en línea con iniciativas en la UE, como el nuevo marco de ayudas de estado, el nuevo fondo de competitividad o el Pacto Industrial Limpio y el Plan de Precios Asequibles de la Energía que presentó recientemente la Comisión Europea.
A nivel más doméstico, la vicepresidenta les ha anunciado una nueva partida de 700 millones de los Fondos Regionales de la UE (Feder) para almacenamiento y que la nueva planificación de redes eléctricas que lanzará en breve dará "prioridad" al sector industrial.
A este respecto, ha asegurado que "muy próximamente", "en las próximas semanas", el Ministerio abrirá a audiencia pública el borrador de la nueva planificación eléctrica, para acompasar las redes de transporte y distribución a la producción y consumo de electricidad previstos, en este caso, durante un plazo que se ha adelantado a 2026-2030, y de lo que depende no solo que las redes puedan asumir la electricidad que de forma masiva se espera que se produzca de fuente renovable, sino que también puedan conectarla con la demanda.
De ello dependen cientos de proyectos industriales y de sectores electrointensivos como los centros de datos, que en estos momentos no pueden abastecerse y para lo que el sector eléctrico reclama poder invertir más en redes de lo que dictan los umbrales máximos que se fijaron en España hace más de una década, no más del 0,13% del PIB al año en redes de transporte -del generador a la subestación- y 0,065% para redes de distribución -de la subestación al consumidor final.
Hace meses, Transición Ecológica se abrió a revisar estos topes y este jueves Aagesen no ha dado cuáles serán los nuevos umbrales pero ha asegurado que serán superiores a los actuales. "Las inversiones van a ser superiores al límite de inversión que había", ha dicho.
