Férrea defensa del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, al fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, imputado por el Tribunal Supremo por la presunta filtración de varios correos electrónicos intercambiados entre el abogado de la pareja de Isabel Díaz Ayuso y la Fiscalía. Sánchez ha asegurado que García Ortiz "ha hecho su trabajo" y "lo que tenía que hacer", que es "perseguir al delincuente" y "combatir la desinformación y el bulo". De hecho, para Sánchez es la presidenta madrileña la que debería dimitir.
"Nos falta que el PP, Alberto Núñez Feijóo, exija responsabilidades a su jefa, Isabel Díaz Ayuso, que no pueden ser otras que la dimisión de la presidenta", ha aseverado Sánchez en una rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo Europeo en Bruselas (Bélgica).
Sánchez ha respaldado así a García Ortiz después de que el Supremo le haya abierto un procedimiento por presunta revelación de secretos. "Respetamos la posición del Tribunal Supremo, pero respaldamos la acción del fiscal general porque ha hecho su trabajo, lo que debía hacer" que, según Sánchez, es "combatir la desinformación y el bulo" y "perseguir al delincuente".
Además, ha ensalzado que la noticia de la imputación del fiscal general "probablemente permita recordar el origen de todo esto" que, según ha dicho, es que "el jefe de gabinete [Miguel Ángel Rodríguez] de la presidenta, a la sazón pareja de este delincuente confeso, propaga un bulo para situar la mentira del lado de la Fiscalía General del Estado".
Al respecto, Sánchez le ha exigido al PP "explicaciones" y "responsabilidades", en concreto, la dimisión de la presidenta madrileña, "que es la pareja de un delincuente confeso, que ha defraudado a Hacienda", ha señalado el presidente, que ya había pedido en otras ocasiones la dimisión de Ayuso.
El secretario general de los socialistas también ha acusado a la pareja de Ayuso de haberse "lucrado y enriquecido con las mascarillas" durante la pandemia de la covid. En este punto, Sánchez ha deslizado que Ayuso se pudo haber "beneficiado indirectamente" de esta situación. "Nadie del PP ha asumido ninguna responsabilidad política y no se la han exigido", ha señalado.
Por ello, el presidente del Gobierno ha criticado que el PP le "exija responsabilidades" y de "lecciones por el caso Koldo, que deja al borde de la imputación al exministro de su Gobierno y el exsecretario de Organización, José Luis Ábalos. "Esta ley del embudo no se sostiene", ha abundado. Y también ha aprovechado para subrayar que los socialistas le "exigieron" el acta de diputado y le abrieron un expediente de expulsión, que aún está en proceso de resolverse.
