Valtteri Bottas ha sido uno de los grandes destacados en el mercado de pilotos de la Fórmula 1 durante los últimos días. El fichaje de Gabriel Bortoleto por Sauber ha dejado al piloto finlandés sin asiento, y todo apunta a que volverá a Mercedes como probador, pero mientras tanto, Bottas ha pasado un día entero completando una de las pruebas más duras del deporte dentro de su casa: un Ironman.
Se trata del desafío supremo del triatlón, una disciplina que combina el atletismo, la natación y el ciclismo. La prueba comienza con 3,86 kilómetros nadando, seguidos de 180 kilómetros en bicicleta y concluye con una maratón: más de 42 kilómetros corriendo.
Bottas arrancó su jornada en la piscina, braceando durante una hora y cinco minutos, a un ritmo de 100 metros cada minuto y 43 segundos. El finlandés realizó un breve parón para tomar un café con galletas y se dirigió a su bicicleta estática.
El aún piloto de Sauber pedaleó durante cinco horas y media a una velocidad de unos 33 km/h. El recorrido, de 180 kilómetros, fue más largo que varias etapas del Tour de Francia 2024, y el dos veces subcampeón mundial de F1 quemó, tan solo en esta sección del Ironman, más de 4.000 calorías.
La jornada del finlandés acabó, por si fuera poco, con una maratón en la cinta de correr. Cuatro horas y 24 minutos después, con un ritmo de 6:15/km, Valtteri Bottas completó el desafío, que compartió a través de sus redes sociales en medio de la convulsión por su futuro.