"La Administración Federal de Aviación (FAA) estuvo contratando trabajadores que padecen discapacidades intelectuales severas, problemas psiquiátricos y otras condiciones mentales y físicas bajo una iniciativa de contratación de diversidad e inclusión".
Con estas palabras el presidente de EEUU, Donald Trump, acusó directamente a sus antecesores, los demócratas Barack Obama y Joe Biden, de permitir la contratación de personas "con problemas de audición y visión, así como parálisis, epilepsia y enanismo". Por ende, aunque indirectamente, también los culpó del accidente que este jueves sufrieron un avión comercial y un helicóptero militar en el Aeropuerto Ronald Reagan de Washington, en el que han muerto 67 personas.
Al respecto, Trump sostuvo que los controladores aéreos deben ser "genios con un talento natural", y no personas contratadas a través de programas DEI, aunque cuando le preguntaron en qué se basaba para lanzar tremendas acusaciones dijo que en su "sentido común".
Lo cierto es que, tal y como recogen algunos medios como The New York Times o The Washington Post, el propio Trump también impulsó programas de diversidad en la contratación de controladores aéreos. Concretamente, en abril de 2019 la FAA anunció un programa piloto para que 20 personas con discapacidades específicas pudiesen trabajar en operaciones de tráfico aéreo. Según la información consultada por los medios, al menos uno de los candidatos del programa consiguió graduarse en 2021 y se convirtió en aprendiz de controlador de tráfico aéreo ese año.
También cabe señalar que, según publican ambos periódicos, la política federal general de contratación de personas con discapacidad se remonta a la Administración Bush en 2003 y a una ley de 1973, y que no existe ninguna evidencia de que ni Obama ni Biden hayan impulsado en este sector laboral más programas de diversidad de lo común.
