El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha defendido este domingo su decisión de imponer una subida de aranceles a China, México y Canadá, aunque ha admitido a los estadounidenses que esas medidas "podrían causar algo de dolor". No obstante, Trump se ha mantenido firme al justificar que "el precio a pagar valdrá la pena".
El mandatario se ha expresado en estos términos en un duro mensaje publicado en su plataforma Truth Social, donde ha cargado contra estos tres países, a los que ha acusado de quedarse de brazos cruzados ante el tráfico de fentanilo desde su producción hasta el paso por las fronteras norte y sur de Estados Unidos.
"El lobby de los aranceles que encabeza el globalista, y siempre equivocado (diario) Wall Street Journal, está trabajando duro para justificar que países como Canadá, México, China y tantos otros por nombrar, sigan estafando a América, como llevan haciendo durante décadas, en términos de comercio, crimen y drogas venenosas que llegan aquí con tanta facilidad", ha manifestado.
"Esos días se han terminado", ha avisado Trump antes de decir que Estados Unidos mantiene un enorme déficit con Canadá, México y China, "y con casi todos los países", al esgrimir que su país "debe 36 billones de dólares" y avisar de que es hora de dejar de ser "el país estúpido".
"¿Habrá algo de dolor? Sí, quizás (¡y quizás no!). Pero haremos EE UU grande de nuevo y valdrá la pena el precio a pagar", ha defendido el mandatario. Por ello, ha instado a sus tres mayores socios a "hacer su producto en EE UU y no habrá aranceles".
Sobre Canadá, Trump ha vuelto a reclamar su anexión y ha dicho que Estados Unidos "subvenciona" a otros países y que estos "pagan una pequeña fracción del coste que los ciudadanos estadounidenses pagan por los medicamentos y (productos) farmacéuticos". Sin esta ayuda, prosigue Trump, Canadá "dejaría de existir como país viable".
"Es duro pero es cierto. Canadá debería convertirse en nuestro querido estado número 51: tendrían impuestos mucho más bajos, gozarían de una protección militar mucho mejor, y nada de aranceles", ha añadido a este respecto antes de llamar a un impulso del producto nacional.
Los aranceles de Trump amenazan con llevar a EE UU a una guerra comercial a tres bandas, pues los tres países afectados han hecho caso omiso a sus advertencias de que aumentará los gravámenes estadounidenses si tomaban represalias y las han prometido con mayor o menor concreción.