Frente a las valoraciones positivas que han hecho PP y PSOE del mensaje de Navidad del rey Felipe VI, el discurso no ha cosechado críticas positivas en otros partidos del arco parlamentario. Muchos socios de los socialistas han seguido la línea de años anteriores y han lamentado las palabras del monarca: mientras que Sumar y Podemos las enmarcan en un discurso "derechizado", los independentistas catalanes las consideran irrelevantes y le siguen afeando el papel que desarrolló tras el referéndum de 2017.
Sumar, partido que forma parte del Gobierno de coalición liderado por Pedro Sánchez, ha calificado el discurso de "decepcionante" y opina que está "derechizado". Entre otros asuntos, le reprocha que señale la migración como problema y que no mencione la violencia de género o las agresiones sexuales.
Y sobre la DANA, la formación que lidera Yolanda Díaz opina que no hubo "un problema de coordinación entre administraciones", sino "de negacionismo climático y negligencia política". De hecho, la portavoz en el Congreso, Verónica Martínez, considera una "absoluta irresponsabilidad" que el rey se sitúe como "árbitro neutral" y se culpe de la DANA a la política.
Además, Sumar lamenta al jefe del Estado que hable de la vivienda sin hacer referencia a "una sola de las demandas de las movilizaciones" de los últimos meses, ya que, a su juicio, en sus palabras solo se ha "centrado en el rentismo". "Lo que hace falta es parar la especulación", clama la formación.
Por último, Sumar concluye que Felipe VI tampoco ha hecho mención al "genocidio palestino", a la guerra de Ucrania o a la crisis climática. "Un discurso encerrado en un paradigma, el del 78, que ya no le dice nada a casi nadie. Menos aún a la gente más joven", sentencia.
Para la secretaria general de Podemos, Ione Belarra, Felipe VI "no es nada más que el proyecto deprimente de la derecha española", y ha compartido en redes sociales sus ganas de que los discursos de Navidad "los dé de una vez la presidenta de la República".
Los independentistas catalanes, por su parte, han mostrado indiferencia ante el discurso del monarca, que aseguran que no han visto. Para el presidente de ERC, Oriol Junqueras, Felipe VI "no está habilitado en ningún caso para pedir a los otros hacer menos ruido cuando él ha contribuido más que nadie", en alusión a las palabras del jefe del Estado dos días después del referéndum del 1-O.
En el cementerio barcelonés de Montjuïc durante la ofrenda anual de ERC ante la tumba del expresidente de la Generalitat Francesc Macià, que murió el día de Navidad de 1933, Junqueras ha criticado que sea Felipe VI el que pida conciliación y menos ruido a los partidos, "un rey que el 3 de octubre de 2017 aplaudía las palizas que la policía había dado a los votantes del 1-O".
También en Montjuïc en homenaje a Macià, el dirigente de Junts Jordi Turull ha calificado como "absolutamente irrelevante y falto de credibilidad" el mensaje navideño del monarca, que asegura que no verá "si no empieza pidiendo disculpas por lo que hizo el 3 de octubre y a partir del 3 de octubre".
Desde EH Bildu, otro socio del Gobierno, Jon Inarritu, ha calificado el discurso como una "turra" y ha lamentado que el rey no hable de "los escándalos y corruptelas que se conocen sobre la Casa Real". "Una monarquía que ni es modélica, ni ejemplar, ni transparente, ni democrática. ¿Para qué sirve un rey?", se ha preguntado.