El 62,9% de los españoles cree que el control de la entrada de los inmigrantes en España es demasiado permisivo y cerca de uno de cada cuatro considera que es "adecuado". La última Encuesta DYM realizada para 20minutos evidencia también que los votantes de izquierdas son los que consideran en mayor medida que el Gobierno es demasiado estricto con este tema, mientras que una mayoría de los de derecha opina que el control es demasiado blando.
La encuesta, realizada a 1.000 adultos entre el 16 y el 18 de octubre, revela que son minoría los entrevistados que consideran que el control migratorio de España sea adecuado: apenas un 22,3% así lo cree. Ni siquiera entre los votantes de los partidos de la coalición, PSOE y Sumar, hay un apoyo mayoritario: apenas el 31,6% de los que votaron a los socialistas en las últimas elecciones y el 41,6% de quienes eligieron la papeleta de Yolanda Díaz aseguran que el control de la inmigración es "adecuado". Entre los partidos de la derecha, en torno a un 80% de los votantes del PP y de Vox sostienen que la política migratoria española es demasiado permisiva.
Preguntados por dónde creen que deberían recaer las competencias de la política de inmigración en España, casi la mitad de los españoles (un 48,5%) defiende que debe ser un asunto que dependa tanto del Gobierno nacional como de la Unión Europea (UE). Una postura que avalan de forma parecida los votantes del PP (54,2%), del PSOE (53,8%) y de Sumar (49,8%); y que, en el caso de los partidarios de Vox, solo es apoyada por el 29,3%. En torno a la mitad de los que votaron al partido de Santiago Abascal el 23 de julio de 2023 consideran que la política migratoria debe ser un asunto prioritario de España y solo el 6,3% opina que tendría que ser algo de lo que se encargue sobre todo Bruselas.
El 44% cree que la inmigración aumenta la inseguridad
En esta última encuesta también se pregunta a los encuestados su grado de acuerdo con una serie de afirmaciones sobre las implicaciones sociales de la inmigración. La aseveración que más consenso genera es la de que "los inmigrantes disfrutan de ayudas públicas que muchas veces se niegan a los españoles": el 55% está "completamente de acuerdo (30,5%) o "bastante de acuerdo" (24,5%). Esta creencia es mayoritaria entre los votantes del partido liderado por Alberto Núñez Feijóo (70%) y los de Vox (66,6%); mientras que entre las formaciones de izquierda la proporción que está de acuerdo con esa afirmación no llega a la mitad: al 44,6% en el caso de los socialistas; al 36% entre los de Sumar.
Además, el 44,6% de los españoles cree que la inmigración "contribuye a aumentar la inseguridad" en el país, y solo un 23% está en desacuerdo con esa idea, que sí secundan casi el 60% de los votantes de Vox y del PP. También los que votaron a las formaciones de derecha en las últimas elecciones generales son quienes opinan en mayor grado que la llegada de inmigrantes está provocando un aumento del desempleo entre la población española. Mientras que uno de cada tres encuestados no está de acuerdo con esa afirmación, la idea coge especial fuerza entre los votantes del partido liderado por Santiago Abascal, que la respaldan en un 46,4%.
El panorama cambia, no obstante, al ser preguntados por la contribución cultural de los extranjeros a España. Un 44% de los encuestados está de acuerdo con que la inmigración "es una oportunidad para vivir en sociedades más tolerantes y plurales", algo que respaldan dos tercios de los votantes de Sumar y el 56,3% de los del PSOE. También hay un 42% de españoles que cree que es justo acoger a los migrantes "porque vienen de sufrir situaciones de pobreza"; y un 36% considera que "es necesario que vengan para que sea posible el crecimiento económico".
Los resultados de esta última Encuesta DYM llegan en un momento especialmente sensible en España por la crisis migratoria que sufre Canarias desde hace ya un año, sin que el Gobierno haya logrado encontrar una solución que aúne los consensos necesarios en el Congreso. El tema migratorio es, de hecho, un asunto que genera división entre los dos partidos mayoritarios en la Cámara Baja, PP y PSOE, que, tras meses de negociaciones, siguen sin llegar a un acuerdo para gestionar la acogida de los migrantes y, en especial, de los menores extranjeros no acompañados.