El canciller de Alemania, Olaf Scholz, y el presidente de Rusia, Vladimir Putin, han mantenido este viernes su primera conversación telefónica en casi dos años. El jefe del Gobierno alemán ha apelado a la voluntad de Moscú para "negociar" con Kiev "una paz justa y duradera".
Scholz ha condenado la "guerra de agresión" iniciada por el propio Putin en febrero de 2022 y le ha reclamado directamente a su interlocutor que ponga fin a la ofensiva y retire a las tropas, según un breve comunicado del Gobierno alemán.
El canciller ha aprovechado para subrayar la "inquebrantable" determinación de Alemania para seguir apoyando a Ucrania "el tiempo que sea necesario". Así, da a entender que continuará brindando ayuda tanto política como militar pese a las tensiones surgidas en Berlín en los últimos meses.
Por su parte, el Kremlin, que ha recalcado en su discurso que la iniciativa partió del jefe del Gobierno alemán, ha dicho que fue una conversación "franca" y "detallada", en la que Putin reiteró algunas de las posiciones que lleva defendiendo durante estos últimos años, como que la actual "crisis" deriva de la política "agresiva" de la OTAN y de los riesgos asociados para la seguridad nacional de Rusia.
Putin sostiene que "nunca se ha negado" a negociar, si bien ha reiterado condiciones que Kiev siempre ha señalado como inasumibles. Así, ha llamado a "tener en cuenta los intereses de la Federación Rusa en el ámbito de la seguridad" y a valorar las "nuevas realidades territoriales", en una alusión velada a la soberanía que ahora Moscú dice tener sobre regiones del este de Ucrania.
El presidente también ha lamentado la "degradación sin precedentes" de las relaciones bilaterales entre Rusia y Alemania, aludiendo a la ya aparcada colaboración en el ámbito de la energía. Putin se ha mostrado dispuesto a retomarla "si la parte alemana muestra interés".
La llamada, que llega en plenos movimientos para reconfigurar el papel europeo ante la inminente vuelta de Donald Trump a la Casa Blanca, ha venido precedida por un contacto entre Scholz y el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski. El Gobierno también ha adelantado que el canciller hablaría una segunda vez con Zelenski tras hablar con Putin.
Además, Scholz ha ampliado esta red más allá de los líderes de Ucrania y Rusia. El primer ministro de Polonia, Donald Tusk, ha confirmado en redes sociales que el canciller alemán le ha llamado para informarle de sus últimos contactos y se ha mostrado "satisfecho" por la posición alemana, en la medida en que implicó una condena de la invasión y tuvo en cuenta la premisa "nada sobre Ucrania sin Ucrania".