Jude Bellingham conquistó al madridismo desde que hace poco más de un año se vistiera por primera vez de blanco y mostrase no solo su calidad, sino el poco tiempo que necesitó para adaptarse a la plantilla de Ancelotti. Tanto fue así que, en estas fechas, el centrocampista inglés ya llevaba 10 goles a sus espaldas, algo que dista mucho de la situación actual en la que no ha anotado ni un solo tanto en este inicio de la temporada.
El inglés no encuentra la portería, y cada vez se le ve más desesperado por ello, algo que se observó en el partido de este sábado en Vigo cuando incluso le recriminó a Vinícius que no le diera un pase para intentar marcar en la primera parte del encuentro contra el Celta.
Lo cierto es que Bellingham a estas alturas del año pasado ya había demostrado su voracidad anotadora, con 10 goles (8 en Liga y 2 en Champions). Tanto fue así que, a pesar de las lesiones que tuvo durante la temporada, acabó el curso con 23 tantos, disputándose no solo el Pichichi del equipo con Vinícius, sino por el de Liga, el cual finalmente se lo llevó Dovbyk.
Sin embargo, dicha situación no se parece en nada a la que presenta el jugador en este inicio de temporada en la que el club le necesita más que nunca. Y es que el Real Madrid, aunque solo ha perdido el partido de la fase de grupos de la Champions contra el Lille por 1-0, no ha mostrado su mejor versión por el momento. Por ello, el conjunto blanco necesita que uno de sus mejores jugadores, como es el inglés, vuelva a estar en su máximo nivel.
La sensación es que Bellingham parece sentirse algo frustrado por no haber marcado todavía. Se pudo comprobar ante el Celta de Vigo, pero también en partidos como ante el Stuttgart en Champions, cuando tuvo la intención de lanzar el penalti que se había cometido sobre Rüdiger. Al final, la decisión se tomó entre Mbappé y Vinícius.
La llegada de Mbappé ha retrasado la posición de Jude
La llegada de Mbappé ha tenido especial incidencia en el rendimiento del jugador inglés. En este sentido, el fichaje del delantero francés ha obligado a Ancelotti a tener que retrasar la posición de Jude para así poder cuadrar a todas sus estrellas.
En un principio, se especuló conque la llegada del futbolista galo podría afectar al rendimiento de Vinícius, pero lejos de la realidad a quien realmente ha afectado es al inglés. Bellingham es ahora más centrocampista que nunca, una posición en la que parece no sentirse del todo cómodo y que le ha hecho reducir su perfil ofensivo. Mientras, Mbappé ya ha anotado ocho goles con el Real Madrid.
Ahora, habrá que ver si Bellingham vuelve a brillar de cara a una semanada decisiva para el conjunto de Ancelotti. En este sentido, el Real Madrid se verá las caras este martes contra el antiguo equipo del inglés, el Borussia Dortmund, en Champions y, el sábado, contra el Barça en el Bernabéu.
