Hace tiempo que los científicos vienen recabando abundantes evidencias de que la infertilidad masculina está aumentando y de que se está produciendo un deterioro en varios parámetros de la calidad del semen de los hombres en países como España.
Por ello, existe un gran interés por el desarrollo de nuevos tratamientos para la infertilidad masculina. Por ejemplo, son varios los estudios ya que han tanteado la posibilidad de usar nanorrobots a modo de 'motores' para mejorar la motilidad de los espermatozoides.
El origen de los robots espermáticos
Según recoge una revisión de la literatura científica al respecto publicada en el medio especializado International Journal of Nanomedicine en el año 2024, la infertilidad se ha convertido en una seria carga de salud pública a nivel mundial, en cuanto afecta a una de cada seis parejas en edad reproductiva. Aunque son varios los parámetros del semen en los que se está encontrando un deterioro, la motilidad del esperma es uno de los destacados. Es también donde, opinan los autores, los robots pueden ser especialmente útiles.
En realidad, la idea de los microrrobots espermáticos viene estando en el tintero desde al menos 2013, momento en el que se presenta el primer prototipo. Este modelo consistía en un espermatozoide móvil con un microtubo magnético enrollado, que podía ser controlado remotamente empleando un campo magnético externo. En estas primeras fases se definen las dos principales posibles aplicaciones de la tecnología, que son la administración de fármacos (por ejemplo, contra el cáncer ovárico) y los tratamientos de reproducción asistida.
Con todo, y a pesar de que el concepto no es nuevo, el salto a la clínica no se ha producido al mismo ritmo. Hay dos dificultades fundamentales: por un lado, que la mayoría de los investigadores del campo son expertos en nanomateriales o en nanoingeniería, más que en salud humana, y por otro que la seguridad de los nanomateriales sigue siendo una barrera.
Retos para el futuro
Además de ello, los autores del trabajo señalan que los trabajos existentes sobre los nanorrobots se ha centrado principalmente en su aplicación como medio para dirigir fármacos al punto deseado, mientras que la posibilidad de la reproducción asistida está menos explorada.
Por ello, los investigadores creen que en primer lugar los esfuerzos deben centrarse en solucionar el problema de la biocompatibilidad, ya sea encontrando nanomateriales que sean seguros o ideando sistemas que permitan su eliminación. También es preciso que futuros trabajos resuelvan los riesgos de contaminación bacteriana o de presencia de anticuerpos que provoquen rechazo.
Adicionalmente, incluso cuando la tecnología esté lista para emplearse, deberá vadear los mismos dilemas éticos que presentan otras técnicas de reproducción asistida. Por ejemplo, sigue existiendo debate sobre si esta clase de procedimientos, aunque lo hagan posible, deben emplearse para la implementación de edición genética en la reproducción asistida; igualmente, debe tenerse en cuenta que los nanorrobots espermáticos podrían saltarse pasos claves en la selección espermática en el tracto femenino que impacten en la salud futura de los niños.
Finalmente, estos científicos proponen que los microrrobots deberían emplearse sólo con espermatozoides con buena genética, cuyos problemas de motilidad se deban a factores del estilo de vida o la inflamación; también, que se practiquen análisis genéticos a los donantes para evitar la transmisión de enfermedades hereditarias, y que se tomen todas las precauciones durante el desarrollo de los embriones fecundados de esta manera.
Referencias
Yixuan Zhang, MIn Wang, Ting Zhang, Honghua Wang, Ying Chen, Tao Zhou y Rui Yang. Spermbots and Their Applications in Assisted Reproduction: Current Progress and Future Perspectives. International Journal of Nanomedicine (2024). DOI: 10.2147/IJN.S465548
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