El motivo por el que te despiertas de madrugada sin alarma ni tener que hacer nada

Una buena noche de sueño puede marcar una gran diferencia en nuestro día, de hecho, dormir mal puede hacer que toda la jornada se convierta en una ‘lucha’, el día se nos hace cuesta arriba, concentrarnos requiere un trabajo mayor y estamos de mal humor. En España, entre un 20 y un 48% de la población adulta sufre dificultad para iniciar o mantener el sueño, según datos de la Sociedad Española de Neurología (SEN), por lo que queda claro que no resulta tan sencillo disfrutar de una placentera y reparadora noche de sueño, algo que todos necesitamos.

No siempre nos encontramos ante el mismo problema, cada persona puede ver cómo su sueño se ve afectado de diferente manera. Por ejemplo, hay personas a quienes les cuesta mucho dormirse, dan vueltas en la cama mientras ven las horas pasar, otros se despiertan y ya no vuelven a conciliar el sueño, los hay que tienen pesadillas o malos sueños, también hay quienes son incapaces de dormir una noche del tirón, despertándose mil veces, ya sea porque tienen que ir al aseo o porque sí. Hay personas que se despiertan a las tres o cuatro de la mañana cada noche, siempre la misma hora, sin tener que poner alarma y sin que sea su intención, ¿por qué sucede esto?

Por qué nos despertamos a las 3 de la mañana

Este es un curioso fenómeno que ha provocado varias teorías, entre ellas la que defiende que a esa hora se produce nuestro despertar espiritual. Sin embargo, parece que la explicación es un poco más terrenal y el motivo por el que algunas personas se despiertan cada noche a la misma hora tiene más que ver con los ritmos naturales del sueño que con cuestiones espirituales.

Las tres de la mañana se considera el momento “en que muchas veces estamos en la fase plena de los sueños y es más fácil despertar, porque no estamos en el sueño profundo de la primera parte de la noche; en ese momento puede ocurrir que nos despertemos con esa típica sensación de estar muy atontados", explicó Giuseppe Plazzi, director del Centro del Sueño IRCCS (Instituto de Ciencias Neurológicas de Bolonia), en una entrevista al medio italiano Il Fatto Quotidiano.

Esto explicaría el motivo por el que nos despertamos a esa hora concreta, aclarando que no se trata de una señal de mala suerte ni de un presagio de muerte. No obstante, también existen factores externos que pueden agravar este fenómeno, como el estrés, que provoca efectos sobre el cuerpo que hacen que nos resulten más complicados conciliar un sueño de calidad, el envejecimiento, que hace que el sueño sea más ligero y, por tanto, resulta más sencillo despertarse, o el uso de algunos medicamentos.

Consejos para una buena higiene del sueño

No siempre es sencillo poder dormir y hay ocasiones en las que es necesario recurrir a profesionales que puedan ayudarnos, pero también hay algunos consejos que podemos poner en práctica y que pueden ayudarnos a conseguir una buena higiene de sueño. El primero de ellos es seguir un horario regular, tratar de dormir siempre las mismas horas, acostándose y levantándonos siempre a la misma hora. Si en 20 minutos no hemos conseguido dormir, lo mejor es salir de la habitación y hacer algo relajante, como leer.

También recomiendan prestar atención a lo que comemos y bebemos, evitando la cafeína, la nicotina o el alcohol. También cenar demasiado tarde o demasiada cantidad, para no acostarse con el estómago demasiado lleno. El dormitorio tiene que ajustarse a lo que necesitamos para descansar, estar a la temperatura adecuada y sin luz, también evitando los dispositivos electrónicos antes de acostarnos.

Es importante evitar las siestas diurnas si tenemos problemas para conciliar el sueño por la noche y, en caso de ser necesarias, que no sean demasiado largas. Se recomienda evitar las preocupaciones y situaciones de estrés, así como hacer un poco de ejercicio físico diario.