En UFC 311 Islam Makhachev debía enfrentarse a Arman Tsarykyan. Sin embargo, la lesión en la espalda de este último hizo que Renato Moicano ocupara su lugar. Todavía no sabemos exactamente el alcance del daño del armenio, pero sí que sabemos que Dana White ya ha dicho que no disputará otra vez el cinturón de manera inmediata.
En este contexto, se abre un escenario que es bueno para Topuria. En realidad, en este momento no hay nadie en el peso ligero que tenga opciones claras de luchar con Makhachev. El daguestaní ha barrido la división y no parece que nadie de los cinco primeros esté en posición de reclamar nada. Oliveira perdió con Tsarukyan y se haría raro que volviera a pelear con el ruso. Gaethje parece que está de salida y lo mismo sucede con Poirier. ¿Por qué no podría ser Topuria el próximo?
Además, el propio Makhachev no descartó el sábado a ningún oponente, algo que incluye al propio hispano-georgiano. De hecho, en sus palabras parecía haber un mensaje implícito para Topuria, que ha dicho en varias ocasiones que podría vender el ruso. "Hay muchos oponentes que dicen que podrían acabar conmigo en el primer o segundo asalto. Ya dije que si puedes llegar a las 155 (libras) puedes meterte en la juega. Hablaremos sobre ello entonces", dijo Makhachev al terminar el combate.
Ilia Topuria ha visto, por tanto, cómo han crecido sus posibilidades de hacer algo que hace unos días parecía imposible. Si vuelve a ganar a Volkanovski, una pelea que, de hacerse, será más o menos durante el período de descanso de Makhachev (que empezará ahora el ramadán), el enfrentamiento podría darse perfectamente al final del verano. Esto siempre que al daguestaní no le dé por subir de división, como ha señalado en las últimas horas, apuntando al cinturón del peso medio.