El presidente del Olympiacos, Evangelos Marinakis, ha sido acusado por la justicia griega de financiar una organización criminal e incitar a la violencia deportiva, en el marco de una investigación judicial sobre el asesinato de un policía por ultras del equipo el pasado diciembre.
Además de Marinakis, quien también es el presidente del Nottingham Forest inglés y el Rio Ave portugués, han sido imputados otros cuatro directivos del equipo, entre los cuales figura Yannis Móralis, quien además de vicepresidente es también alcalde de El Pireo, informa el portal skai.gr.
El 7 de diciembre de 2023 un grupo de ultras del equipo de El Pireo abandonó un partido de voleibol en Atenas para atacar con bengalas y cócteles molotov a la policía antidisturbios situada afuera del estadio. Durante los disturbios, un agente de 31 años recibió en el muslo el impacto de una bengala, por lo que fue hospitalizado en la UCI, donde falleció tres semanas después. En el incidente estuvieron involucrados grupos organizados de ultras del equipo de fútbol del Olympiacos, según la prensa local.
Marinakis, entonces también presidente de la liga griega de fútbol, se vio obligado a dimitir, mientras que el Gobierno griego obligó a todos los equipos de fútbol a instalar cámaras de vigilancia dentro de los estadios y organizar sistemas de venta de entradas personalizadas.
Unos días después del ataque, las autoridades detuvieron a 167 personas bajo la sospecha de estar involucradas en el asesinato del agente, 25 de los cuales han sido puestos en prisión preventiva, incluido un joven de 18 años que ha sido acusado de disparar la bengala.
La mayoría de los acusados son líderes del grupo oficial de aficionados del Olympiacos "Puerta 7", acusados de pertenecer a una organización criminal que organizó y perpetró el asesinato.
No obstante, el fiscal que lleva el caso ha estado investigando también la posibilidad de que dicha organización "esté dirigida, de forma encubierta y al más alto nivel, por miembros de la dirección o ejecutivos del Olympiacos", según un expediente filtrado a la prensa tras el asesinato.
Así, el fiscal pidió que se presentaran cargos por los presuntos delitos de financiamiento de una organización criminal e incitación a la violencia deportiva a Marinakis y los demás cuatro directivos, según el portal ieidiseis.gr.
