Alberto Núñez Feijóo ha encontrado una baza argumentaria con la que contrarrestar su intento fallido de tumbar la candidatura de Teresa Ribera en Europa. Tras su hazaña "incuestionable" de la semana pasada, cuando logró que todo el PP europeo pospusiera la votación del colegio de comisarios hasta que la ministra compareciera en el Congreso para dar cuenta de la DANA, el líder del PP español se quedó solo en su empeño de demostrar que no es apta para el puesto. Tras escuchar las explicaciones de la responsable de la Transición Ecológica y el Reto Demográfico en la Cámara Baja, el PPE [PP europeo] levantó su veto y llegó a un acuerdo con socialistas y liberales para dar el visto bueno a toda la nueva Comisión Europea, incluida Ribera, pese al rechazo del PP español. No obstante, los de Feijóo usan este pacto a su favor.
"El PSOE cambia de postura y acaba pactando con el partido de Viktor Orbán y con el partido de Georgia Meloni, llevándose por delante la última barrera ideológica de Pedro Sánchez al ser quien apadrina la entrada de la 'extrema derecha', tal como él la define, en la gobernabilidad en Europa", sostienen en el equipo de Feijóo. El PP cree así haberle desmontado otro principio al PSOE, ya que la manera que ha encontrado Sánchez de "ungir" a Ribera ha sido dar su beneplácito a los comisarios propuestos por los partidos de Orbán y Meloni, con los que prometió acabar.
Y es en esta línea roja que se habría saltado Sánchez en la que centrarán su oposición: "Es una baza argumentativa que no soltaremos en mucho tiempo", avisan desde Génova. Además, tratan de excusar su falta de apoyos dentro del PPE, días después de haber contado con el apoyo de Manfred Weber. "El EPP o el Partido Popular hayan cambiado de criterio. Weber dijo que cualquier opción de Ribera pasaba por comparecer en el Congreso en España. Y además avanzó que le pedirían un compromiso con su posible dimisión en caso de ser imputada".
Si bien es cierto que fueron las condiciones que puso el alemán para posponer la votación hace una semana, los de Feijóo mantenían la esperanza de contar con su apoyo hasta el final: "Hemos sido informados de enfrentamientos en el seno de S&D por la negativa de algunos eurodiputados a avalar a los comisarios húngaro e italiano para salvar la candidatura de Ribera. Aún quedan socialistas a los que les preocupa la coherencia y los principios, aunque por desgracia ninguno sea español". Aun así las expectativas fueron desinflándose a medida que trascurrían las horas.
En lo que sí se ha mantenido inmóvil el PP de Feijóo es de ir hasta el final en su ofensiva pese a quedarse solo en la votación. También se congratulan de otros tantos éxitos que ya celebraron nada más se pospuso la votación a Ribera. Por un lado, creen que haber conseguido un "desgaste internacional" de Sánchez y haber puesto en cuestión la gestión de Ribera a cuenta de la DANA hasta el punto de que ha ido "obligada" a comparecer bajo la "atenta" mirada de toda Europa que le ha puesto como condición que dimita si acaba imputada por la DANA. Por otro lado, los de Feijóo asumen como un éxito que el presidente del Gobierno haya traspasado una de sus líneas rojas: votar junto a la "ultraderecha".