El serbio David Knezevich, esposo de Ana María Knezevich, la colombo-estadounidense que desapareció el pasado 2 de febrero en Madrid, fue acusado de asesinato por un gran jurado de un tribunal estadounidense. La acusación formal fue presentada este miércoles y formula tres cargos de secuestro con resultado de muerte contra Knezevich, de 36 años y radicado en el sur de Florida.
Sobre Knezevich, que fue arrestado en mayo en el Aeropuerto Internacional de Miami (MIA) cuando llegaba de Serbia, solo pesaba hasta ahora un cargo por el secuestro de su esposa de 40 años, Ana María Henao Knezevich, algo para lo que se había declarado inocente.
La acusación de este miércoles alega que Knezevich "capturó, confinó, secuestró, raptó y se llevó intencionadamente" a Henao Knezevich y la mató "intencionadamente, deliberadamente, maliciosamente y con premeditación y alevosía".
La última noticia que sus allegados tuvieron de ella es que estaba buscando un nuevo apartamento de alquiler con la expectativa de no volver a la vivienda de Fort Lauderdale, al norte de Miami, y quedarse en Madrid a largo plazo.
Salió del piso con una maleta
A la mujer se le perdió la pista poco después de que un hombre que llevaba un casco de moto desactivara las cámaras de seguridad del edificio de apartamentos en Madrid donde ella se alojaba y rociara con aerosol las lentes de las cámaras. Este hombre fue identificado después como Knezevich, quien presumiblemente entró en el domicilio de su esposa y salió del mismo con una maleta, que, según las sospechas de las autoridades, podía contener el cadáver de la mujer y de la que se deshizo cuando regresaba en un vehículo alquilado a la capital serbia, el mismo con el que viajó a Madrid.
Los fiscales señalan que un vídeo de seguridad mostró a Knezevich en una ferretería de Madrid usando dinero en efectivo para comprar cinta adhesiva y la misma marca de pintura en aerosol que el hombre del casco de motocicleta usó en la cámara de seguridad. También alegan que el hombre del casco de motocicleta tiene la misma altura y las mismas cejas que Knezevich y que su teléfono se conectó a Facebook desde Madrid.
El acusado, empresario tecnológico naturalizado estadounidense, viajó a España para "secuestrar" a su esposa en su apartamento de Madrid, un hecho que "respaldan una gran cantidad de pruebas circunstanciales" presentadas por la Fiscalía, sostiene el FBI. Knezevich, que permanece arrestado sin derecho a fianza, defiende que no ha pisado nunca España y que no tiene nada que ver con la desaparición de su exmujer.