¿Duermes de lado, lo haces boca arriba o simplemente no puedes quedarte dormido a menos que estés boca abajo? La mayoría de las personas son bastante específicos en cuanto a su posición preferida para una buena noche de sueño, pero hay una que todos deberíamos evitar.
Es lo que dice doctora Daria Sadovskaya, nefróloga (especialista en riñones), quien afirma en un vídeo en su canal de TikTok que dormir de determinada manera puede causar numerosos problemas en el organismo.
En su vídeo, Sadovskaya muestra con ejemplos varias posiciones típicas para dormir en orden de cómo de perjudiciales pueden ser para la salud. Comienza durmiendo boca arriba, la posición más recomendada.
"Esta se considera la mejor posición para dormir porque mantiene la cabeza, el cuello y la columna en una alineación neutra, lo que reduce el riesgo de dolor", dice la Sadovskaya. "También minimiza la presión sobre las articulaciones y puede prevenir las arrugas faciales, ya que no hay presión en la cara", añade.
Luego se pone de lado, apoyando una mano debajo de la almohada, lo que según ella es la "segunda mejor posición". "Dormir de lado es muy beneficioso", afirma la doctora.
"Para mantener una alineación adecuada, utiliza una almohada de apoyo entre las rodillas para mantener la columna neutra. Esta posición también es excelente para reducir los ronquidos y aliviar la apnea del sueño al mantener abiertas las vías respiratorias", añade Sadovskaya.
La tercera posición es dormir boca abajo. "Esta posición generalmente no se recomienda porque puede tensar el cuello y la columna debido a que la cabeza permanece girada hacia un lado durante períodos prolongados", agrega la doctora.
"Además, aumenta la presión en la zona lumbar, lo que puede provocar molestias", dice.
Y por último, muestra la peor posición: acostada boca abajo con una pierna flexionada. La experta afirma que esto es "particularmente problemático" y añade: "Levantar una pierna hace que la pelvis rote, tuerza la zona lumbar y provoque una desalineación de la columna". Con el tiempo, esto puede provocar dolor de espalda o rigidez.
"También puede causar tensión en el cuello: girar la cabeza hacia un lado durante períodos prolongados puede tensar los músculos del cuello e incluso provocar una compresión nerviosa", prosigue.
"La posición desigual de las caderas (una elevada y otra plana) también puede crear tensión en los flexores de la cadera y resultar en una presión desequilibrada sobre la pelvis", añade
"Además, dormir boca abajo comprime el pecho, lo que dificulta la respiración profunda y reduce el consumo de oxígeno. Incluso puede provocar acné, arrugas e hinchazón en la cara", dice Sadovskaya.
