El lateral español Marc Cucurella, una de las sensaciones de la selección campeona de la Eurocopa el pasado verano, se ha sincerado públicamente sobre las dificultades a las que se enfrentan él y su pareja con Mateo, su hijo mayor, de seis años y con autismo.
El futbolista del Chelsea se pasó por el canal de YouTube de La Media Inglesa y allí repasó su lado más personal y desconocido, confesando su amor por los pequeños.
"Siempre me han gustado los niños. Una vez tuvimos uno hablé con mi pareja y dijimos: estamos KO, no dormimos ni nada... Ya que estamos, cuando durmamos, que durmamos del tirón. Es un caos", bromeó.
En cuanto al autismo de su hijo mayor, Marc Cucurella confesó que vivieron momentos difíciles hasta enterarse de ello: "En Brighton él todavía era pequeño. El médico no nos decía lo que tenía, todavía era pequeño para saberlo".
"Es difícil. Nadie te enseña a ser padre, pero al final vas viendo... Un hijo autista no entiende las cosas como sus hermanos, hay que aprender a entenderlo. En el colegio normal no le iba bien, se ofuscaba, no era feliz", arrancó diciendo.
"No se adaptaba, se quedaba llorando todo el rato. Hacía dos o tres horas y no le gustaba, teníamos que irle a buscar. Eso también afecta mucho: no ves bien a tu hijo y no sabes cómo ayudarlo", recordaba con emoción.
Sus problemas personales se agravaron con los malos resultados en el terreno profesional, pero la situación ha cambiado: "No encontrábamos la manera de ayudarle hasta que encontramos otro colegio en Londres y ya hemos mejorado mucho. Ahí nos ayudan, hacemos charlas, aprendes a llevarlo y lo entiendes. Él se hace entender, pero necesitas conocerlo".
Por último, el lateral de la selección española hizo balance de ello: "Tiene su parte negativa, todo cuesta más, todo es más difícil. Pero también su parte buena: cuando consigues algo, un simple avance, da mucha más satisfacción".
