Con la creciente preocupación por el cambio climático y el aumento del precio de la energía, muchos hogares en España están buscando alternativas más eficientes y sostenibles para climatizar sus viviendas. En este contexto, las bombas de calor se están posicionando como una solución clave.
Este sistema no solo ofrece una eficiencia energética sin precedentes, sino que también reduce las emisiones y ayuda a cumplir con los ambiciosos objetivos de descarbonización de la Unión Europea.
¿Qué es la bomba de calor y para qué sirve?
Una bomba de calor es un dispositivo que transfiere calor de un lugar a otro, utilizando electricidad para mover energía térmica desde el exterior al interior de una vivienda (o viceversa).
Su gran ventaja radica en que, por cada kilovatio hora (kWh) de electricidad que consume, puede generar entre tres y cinco veces más energía en forma de calor. En comparación con las calderas de gas o de petróleo, esto supone una eficiencia mucho mayor. Además, la energía la obtiene de fuentes externas, gratuitas y sostenibles.
Para entenderlo de manera sencilla: la tecnología que se usa en una bomba de calor es similar a la que hay en un frigorífico o un aire acondicionado. Su funcionamiento consiste en extraer el calor de una fuente, como el aire circundante o la energía geotérmica del suelo y amplificarlo y moverlo donde se necesita. Este procedimiento es especialmente útil y económico para la calefacción convencional, como calderas o calentadores eléctricos.
Es decir: este tipo de sistemas no solo sirven para calentar el hogar en invierno, sino que también pueden refrigerar en verano, funcionando como un equipo de aire acondicionado.
Tipos de bombas de calor
Hay distintos tipos de bomba de calor, dependiendo de dónde extrae la energía: del aire, del agua o del suelo. Para su funcionamiento, son necesarios los siguientes elementos:
- Un compresor: transforma la energía eléctrica y eleva la presión del fluido refrigerante.
- Un condensador: condensa el refrigerante, que pasa de estado gaseoso a líquido con el intercambiador de calor.
- Una válvula de expansión: genera una elevada pérdida de carga y, así, reduce la temperatura para producir la expansión del fluido refrigerante.
- Un evaporador: evapora el fluido frigorífico, se absorbe el calor y vuelve a iniciar el proceso.
¿Cómo funciona una bomba de calor aerotermia?
La aerotermia es otro tipo de energía renovable que aprovecha la energía térmica que ya está en el aire y la transfiere al interior de la vivienda. Así, proporciona calefacción, refrigeración y agua caliente sanitaria. En este sentido, la aerotermia es un tipo de bomba de calor, la que se extrae del aire.
No obstante, también existe la hidrotermia (extrae el calor del agua) y la geotermia (de la tierra). La energía renovable obtenida gracias a la aerotermia se capta mediante un intercambiador y un ventilador de ambiente exterior.
Los sistemas más modernos están equipados con tecnología inteligente que permite el control remoto mediante aplicaciones móviles, facilitando la gestión de la temperatura y el consumo energético desde cualquier lugar, lo cual mejora la experiencia del usuario y permite optimizar el uso de la energía.
¿Cuánto se ahorra con una bomba de calor?
La Agencia Internacional de la Energía asegura que la bomba de calor puede ahorrar casi 900 euros en la factura de la calefacción. En términos de gastos mensuales, depende de los precios de la luz y del gas. "Hay que tenerlo todo en cuenta", destacan los expertos. La caldera depende de la factura del gas, mientras que la bomba de aire depende de la luz. En los últimos meses, la factura de la luz es mucho más elevada que la del gas.
Según estimaciones, un hogar promedio en España que sustituye una caldera de gas por una bomba de calor puede reducir su gasto energético entre un 40% y un 70%.
¿Cuánto cuesta instalar una bomba de calor en España?
Aunque a largo plazo supone ahorrar en la factura, también es importante tener en cuenta el desembolso que supone la instalación de este sistema. En este sentido, instalar una caldera es más barato que instalar una bomba de calor.
No obstante, como ventaja, se debe pensar en algo sencillo: la caldera necesita una instalación más cuidadosa para evitar accidentes por fugas en las tuberías, mientras que la bomba de calor es mucho más sencilla de colocar.
El coste de instalación de una bomba de calor en España varía dependiendo del tipo de sistema y las características de la vivienda. Existen tres tipos principales de bombas de calor:
- Aire-aire: el sistema más económico, con un coste que oscila entre 2.000 y 5.000 euros.
- Aire-agua: más adecuado para sistemas de calefacción con radiadores o suelo radiante, con precios entre 6.000 y 12.000 euros.
- Geotérmica: la opción más costosa y eficiente, que puede alcanzar entre 10.000 y 20.000 euros, ya que requiere perforaciones en el suelo para captar energía geotérmica.
El coste de poner una bomba de calor en una vivienda ronda entre los 2.000 y los 6.000 euros, dependiendo de la empresa. En el caso de la caldera, el precio total de instalación varía entre los 1.000 y los 2.000 euros.
Ayudas y subvenciones en España para instalar bombas de calor
A pesar de estos costes iniciales, las subvenciones y ayudas disponibles a través de programas nacionales y europeos, como el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia o el Programa de Rehabilitación Energética de Edificios (PREE), pueden cubrir hasta el 40% del coste de instalación, lo que facilita el acceso a esta tecnología para muchos hogares.
Apúntate a nuestra newsletter y recibe en tu correo las últimas noticias sobre tecnología.
