La Confederación Española de Transporte en Autobús (Confebus) ha denunciado este lunes que los piquetes informativos de la huelga que tiene lugar hoy en el sector del transporte de viajeros han roto una treintena de lunas de algunos autocares en las primeras horas del día, lo que está impidiendo que estos vehículos realicen los correspondientes servicios.
Pese a ello, la patronal destaca que estos incidentes son aislados y que según van avanzando las horas del día las empresas están realizando servicios "muy por encima de los mínimos fijados". Por su parte, los sindicatos aseguran que "el seguimiento de la primera jornada de huelga en los autobuses urbanos, interurbanos y grúas está siendo total".
Además, denuncian que "los servicios mínimos dictados por las distintas administraciones son abusivos, con porcentajes incluso del 100% en algunos servicios que ni siquiera son esenciales y pueden garantizarse mediante otros medios de transporte que no están en huelga".
El objetivo de la huelga es que las patronales Confebus y Atuc firmen el inicio del procedimiento de aplicación de coeficientes reductores y la jubilación parcial voluntaria para sus conductores.
"A pesar de que estas medidas son el resultado de los acuerdos tripartitos del diálogo social, estas patronales bloquean que se puedan poner en marcha, impidiendo el adelanto de la edad de jubilación de las personas conductoras profesionales", explican los sindicatos.
Hoy ha dado comienzo la huelga de transporte de viajeros por carretera y de grúas convocada por UGT y CCOO tras la ruptura de las negociaciones entre los sindicatos y las patronales del sector por la jubilación anticipada, a diferencia de lo ocurrido con el transporte de mercancías.
Estas movilizaciones, que afectan al transporte de pasajeros urbano, interurbano, discrecional y escolar, llegan tras fracasar el pasado jueves las negociaciones en el Servicio Interconfederal de Mediación y Arbitraje (SIMA).
Además del paro de este lunes, se realizarán otros los próximos 11, 28 y 29 de noviembre y 5, 9 y 23 de diciembre. Los sindicatos advirtieron cuando se convocó la huelga de que esta pasaría a ser indefinida a partir del 23 de diciembre si no se satisfacían sus reivindicaciones.