Ander Herrera aterrizó este miércoles en Buenos Aires, Argentina, tras rescindir su contrato con el Athletic para firmar por Boca Juniors. El español fue recibido como un héroe en el aeropuerto, pero entre la nube de fans que le acompañaron en la salida apareció un ferviente hincha del Zaragoza que le recriminó su llegada al país sudamericano en vez de ayudar al equipo en el que creció como profesional.
"'¡Ander, después juntémonos por favor. Aguante Zaragoza, Ander carajo vamos. Aguante el 'León', salgamos de estos doce años!", le gritó al futbolista, que tras atender a los medios escapó de la marabunta de hinchas en una furgoneta.
Las imágenes de este seguidor del equipo maño fuero tomadas por el periodista Lucas Bendayan, que le preguntó al aficionado por el significado de la llegada de Ander a Argentina: "Tiene que hablar conmigo, no sé por qué está aquí y no en Zaragoza. Soy hincha de Zaragoza, no sé por qué está acá y no allá, pero todo bien... hablaremos, tenemos que ayudar a que subamos a primera de una puta vez", expresó enfadado.
Curioso fue el final de sus declaraciones, cuando el hincha declaró el motivo por el que sigue al equipo maño: "Por Héroes del Silencio", zanjó en un vídeo compartido por el diario Olé.
Ander Herrera, feliz en su llegada a Boca
Con más de 100 simpatizantes 'xeneizes', y varios medios de comunicación esperando, llegó el mediocampista de 35 años, que tiene grandes expectativas en su nueva etapa en Argentina: "Estoy muy feliz. Es momento de adaptarme y disfrutar de esta experiencia única. Solo pienso en Boca", fueron sus primeras palabras tras pisar suelo argentino.
Al ser preguntado sobre si ya había tomado contacto con Juan Román Riquelme, el exmediocampista de Athletic Bilbao, Manchester United y París Saint Germain, dijo que ya he hablado con él y que no quiere "pensar en mucho más allá" que ponerse a punto y en el partido de Copa (Argentina) de la próxima semana. "Y por eso espero hablar hoy con Fernando Gago (el entrenador)", añadió.
"Llego a un equipo con una historia única y una pasión incomparable. Mi padre trabajó aquí mucho tiempo, me habló mucho de Boca y mantengo esa pasión. Jugar aquí es algo único y se te pone la piel de gallina. Ahora queda disfrutar", concluyó el jugador, que llega a un club que en junio jugará el Mundial de Clubes.