Lo que muestra '#SeAcabó: Diario de las Campeonas': "Había división entre una 'España B' de Vilda y las que renunciaron"

Cuando la selección española femenina de fútbol aterrizó en Australia para disputar el Mundial por tercera vez en su historia, tras un año de conflicto con la RFEF, lo hizo con un grupo roto al que habían regresado algunas de las integrantes de 'las 15'. Ahí arranca la historia de la película documental #SeAcabó: Diario de las Campeonas, que cuenta la versión de las jugadoras en boca de sus protagonistas.

"Se hace un recorrido donde tú entiendes el por qué 15 jugadoras renuncian [a ir con la selección] después de jugar una Eurocopa, y todo lo que ha ocurrido en esa renuncia hasta llegar a un Mundial con bastante desunión, donde había una división clara entre una 'España B' llamada por Vilda, y unas jugadoras que habían renunciado y que luego muchas de ellas volvieron para ganar un Mundial y defender la camiseta e intentar arreglar las cosas desde dentro", explica Javier Martínez, director de Originals You First, en una conversación con 20minutos, en la que también señala que se hace "un pequeño flashback atrás para entender más el contexto de dónde venían, de aquella época de Quereda".

Aquí, en el primer espacio en el que las internacionales rompen su silencio para explicar todo lo ocurrido, el foco está plenamente en ellas: "El documental dura una hora y media y con cada una, estuvimos como cuatro o cinco horas hablando", señala Joanna Pardos, directora de la película, que hace hincapié en que cada una de las jugadoras cuenta su propia historia.

"Cada una también tiene su trama particular, porque cada una tuvo también sus conflictos, sus dudas, sus vulnerabilidades", asegura la directora. "Hemos intentado, a pesar de que es un relato coral y que lo importante es la historia colectiva, que tuviera este carácter íntimo y personal y que cada una tuviera ese momento para explicar su propio sufrimiento", añade.

En #SeAcabó: Diario de las Campeonas, las internacionales "se abren en canal", pues muestran "las dudas, las cosas que a lo mejor creen en algún momento que se han equivocado, cosas que les hubiese gustado hacer de otra forma, las contradicciones que sentimos muchas veces en la vida", y todo el sufrimiento ello conlleva.

Para la directora, uno de los momentos más emocionantes del documental es el encuentro entre Jenni Hermoso, Alexia Putellas e Irene Paredes: "Por primera vez verbalizaban juntas lo que había sucedido y cómo se habían sentido. Al final, son tres amigas comentando algo que las ha hecho pasarlo mal y lo que sucede ahí es tan verdad, tan emocionante y con reproches incluidos, porque como en cualquier grupo de amigas a veces no estás del todo de acuerdo en cómo se ha comportado una o cómo reaccionó la otra, con agradecimientos, con recuerdos de cosas dolorosas que todavía no te habías atrevido a hablar".

Un momento que se vivió en el set con "una mezcla de dolor e indignación, pero sobre todo, de mucho, mucho orgullo". "Esa admiración entre amigas, admirar lo que ha hecho tu compañera, es algo muy emocionante y que serviría como resumen de ese encuentro, que es casi orgullo y admiración de lo que ellas habían conseguido", sentencia.

En este sentido, la directora recuerda la frase de Jenni Hermoso en el documental, en la que la máxima goleadora de la selección señala que "ganamos para ser escuchadas y al final mira", en referencia al beso no consentido de Rubiales y todo lo que vino después, y asegura que añadiría algo más: "Faltaba este 'plot twist' en el que ellas acaban teniendo un altavoz mayor".

"Es decir, queríamos ser escuchadas y el tío la cagó tanto que nos dio un altavoz que no solo nos escucharon aquí, sino que nos escucharon en el mundo entero. Y esto lo hace una una historia muy, muy de película. Vale mucho la pena verla", afirma Pardos.

No pasa de puntillas en el documental el momento del beso. De hecho, Pardos apunta a que "es una de las cosas más interesantes del documental", en el que "hay un momento donde cada una de ellas cuenta todo lo que pasa con todo detalle, desde que se pita la final del partido hasta prácticamente que se suben al avión".

"Ahí te das cuenta de qué banales son los análisis que hemos hecho desde fuera, porque estar ganando algo tan potente y a la vez que pase algo tan surrealista es tan bizarro, que escucharlas a ellas te ayuda realmente a entender los detalles, las cosas que pasan dentro del vestuario, las cosas que pasan en el bus... Todo eso, es tan heavy lo que acaban contando", concluye la directora.

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