La incógnita que se cierne en estos momentos sobre si la gratuidad y los descuentos de los trenes, Cercanías y transporte urbano terminará el 31 de diciembre o se extenderá durante 2025 tiene en vilo a buena parte de los españoles. En concreto, a los más de cinco millones que han disfrutado durante este año de abonos gratuitos para viajar en tren de media distancia y cercanías y a los millones de personas que en grandes ciudades como Madrid, Barcelona o Sevilla son usuarios de un abono transporte. En los dos últimos años, el número de viajes y el de viajeros en transporte público ha experimentado cifras históricas, animados en buena medida por descuentos del 50 y el 60% por título y abonos gratuitos que, si no hay decisión en contrario, llegarán a su fin el 31 de diciembre. De momento, la única voz en el Gobierno que se ha pronunciado ha sido nada menos que el ministro de Transportes, Óscar Puente, para apuntar hacia su desaparición, al menos tan genéricos y universales en algunos casos como los hemos conocido desde 2022.
Los descuentos y abonos gratuitos para el transporte público son una de las medidas que empezaron a tomarse hace dos años para ayudar a los ciudadanos a hacer frente a la inflación debido a la crisis energética. Apareció por primera vez en un decreto de junio de ese año, con un descuento del 30% para títulos multiviaje de transportes de competencia estatal, autonómica y municipal y poco después, en septiembre, se amplió con la gratuidad total para los abonos de pasajeros frecuentes de Cercanías y Media Distancia. En principio, solo durarían hasta diciembre de 2022, pero el Gobierno las prorrogó primero durante todo 2023, con la novedad de que los descuentos en los abonos de transporte urbano se mantendrían solo si las comunidades aportaban al menos un 20% adicional. Un año después y al mismo tiempo que empezaba a eliminar otras ayudas, como las rebajas en el IVA de electricidad y gas, los descuentos para el transporte público se renovaron de nuevo para todo 2024.
Cifras históricas de viajes
Desde entonces, el número de viajes en tren de Media Distancia, de trenes Avant y, a pesar de todas las incidencias, de Cercanías, así como en el metro y el autobús de las grandes ciudades ha alcanzado cifras históricas que en buena medida las empresas de transporte relacionan con que los billetes so al menos la mitad de baratos que hace dos años. También los usuarios. Según una encuesta de la Autoritat del Transport Metropolità (ATM), que sea "más barato que el coche" es el tercer principal motivo por el que los habitantes de Barcelona cogen el transporte público después de que es "más cómodo" y por la "dificultad para aparcar". El año pasado, era un motivo para el 26,2%, 4,1 puntos más que en 2017.
En lo que va de año, Renfe ha expedido más de cinco millones de abonos gratuitos a usuarios frecuentes de Cercanías, Rodalies y trenes de Media Distancia, a los que se suman otros 337.000 pasajeros de trenes Avant, que han disfrutado un descuento del 50%. Aunque no forman parte de este programa de bonificaciones, esta misma semana se conocían los resultado definitivos de la segunda edición del Verano Joven, para promover a través de descuentos de 90 y 50% para viajar en tren el uso de transporte público. Este año, la experiencia se ha cerrado con 5,2 millones de viajes, 1,2 millones más que el año pasado.
Por lo que respecta al transporte urbano, en el primer año entero de aplicación del descuento del 60%, el número de personas que sacó el abono transportes en Madrid fue de 1,1 millones superior a los del año anterior, según el Consorcio Regional de Transportes, de modo que se elevó a un total de 5,5 millones de personas que se beneficiaron de la rebaja del precio. En Barcelona no existe una cifra absoluta de número de abonos, pero 2023 cerró con una demanda de transporte público un 17% superior a 2022, "un nuevo récord absoluto", según la ATM, que constata que lo usuarios se inclinaron por billetes para viajeros recurrentes más que la tarjeta casual, que ya representan el 80% de los títulos integrados de transporte. También los habitantes de Sevilla prefirieron abonos más que billetes simples y en la primera mitad de este año los abonos para viajar por la ciudad crecieron un 37% con respecto a 2023.
Mirando el número de viajes, las cifras del año pasado también fueron de recórd. El número de validaciones de billetes en los 18 núcleos de Cercanías crecieron un 18,2% con respecto a 2022, pasando de 372.484.500 viajeros a 440.158.500. En la red de Cercanías de Santander crecieron un 158%; en la de Cádiz, un 50,9%, y la de Cantabria, un 49,5%. En torno a las grandes ciudades el crecimiento también fue muy notable A pesar de las incidencias, el año pasado los viajes en Cercanías Madrid crecieron un 12,%, en Rodalies Cataluña, un 19,4%; en Valencia, un 36,8, en Sevilla, un 42,6% y en Bilbao y Málaga, un 35,6% y un 42,6% respectivamente.
Gratuidad coyuntural, medidas más limitadas
La última prórroga de los descuentos en el transporte expira el 31 de diciembre en un contexto en el que la subida de la inflación que la motivó parece controlada, en el que se acaban de suprimir las últimas rebajas fiscales y en el que, en el contexto concreto del transporte, el Gobierno ha pasado de defender los descuentos para incentivar el transporte público y promover el ahorro de los hogares en combustible a empezar a verlos como uno de los elementos que va en contra de la sostenibilidad de empresas como Renfe, en un año en el que se declaró oficialmente la guerra de precios de la alta velocidad que, de momento, ha redundado en pérdidas para la operadora española y sus competidoras, Ouigo e Iryo.
Aunque desde el Gobierno se señala que todavía es pronto para decidir sobre el futuro de los descuentos del transporte cuando aún quedan tres meses para que termine el año, Puente dejó claro hace unos días que no es "partidario" de mantenerlos en su forma actual, como una ayuda universal en el transporte urbano y también muy generalizada en la Media Distancia y Cercanías. "Puedo anticipar que mi posición es que esta política debe cambiar", dijo en una entrevista en la Cadena Ser.
"La política de gratuidad del transporte público ha sido coyuntural, para aliviar las economías familias y la apuesta por el transporte público debe ser en la calidad, en las frecuencias, ahí es donde hay que hacer el esfuerzo", añadió el ministro. Según apuntó, el Gobierno podría decidir cambiar el 'gratis total' de algunos tipos de transporte colectivo o la rebaja general por una medida más restringida, que se limite a colectivos vulnerables o para usuarios que realmente sean frecuentes, con descuentos mayores cuanto mayor es el uso del tren de media distancia.
De momento, el Ministerio ha empezado a reunirse con colectivos afectados para diseñar cómo serán las próximas medidas sobre el precio del transporte público. Hace dos semanas, el secretario general de Movilidad Sostenible, Álvaro Fernández Heredia, mantuvo un encuentro con las Asociaciones de Viajeros Recurrentes de Alta Velocidad, a las que expuso algunas ideas para aplicar a partir de 2025 que pasan por bonificaciones más quirúrgicas, centradas en estudiar los "perfiles" que más utilizan, en este caso el tren de media distancia y Avant, con la idea de priorizar a los verdaderos pasajeros frecuentes y cerrar el paso, por ejemplo, a quienes compran un abono porque es más barato que un billete puntual pero después no utilizan más viajes. Fuentes presentes en el encuentro lo calificaron de un "éxito" de él salieron con la "tranquilidad" de que a partir del año que viene Transportes no devolverá todos los billetes de tren al mismo precio de 2022.
Hasta entonces, la palabras de Puente tuvieron un efecto inmediato en algunos gobiernos autonómicos, que pidieron aclaraciones sobre qué sucederá a partir del 1 de enero.
"Estamos en octubre y el ministro todavía no ha comunicado a las comunidades qué va a ocurrir con los precios del abono y si va a ampliar esa reducción o si va a eliminarla y no vamos a disfrutar de esa bonificación", afirmó un día después el consejero madrileño de Presidencia, Miguel Ángel García. La posibilidad de que los billetes vuelvan a subir a partir de enero también creó inquietud en Cataluña y su consellera de Territori, Silvia Paneque, aprovechó una reunión con Puente en Madrid para abordar con él esta cuestión, sobre la que apuntó que todavía no hay una "decisión firme".
