A Alberto Núñez Feijóo no le compensa exigir por ahora la dimisión de la fundadora de Sumar, Yolanda Díaz. Pese a haberla acusado de conocer y tapar los comportamientos sexuales de su ahora exportavoz Íñigo Errejón, el líder de la oposición aguarda la batalla interna desde la barrera: "No tenemos necesidad de que el PP lidere la ofensiva contra Sumar y Podemos", sostienen desde Génova. Así, los populares optan por dejar que los socios del Gobierno se "desgasten" solos.
Este lunes, el presidente popular tuvo la oportunidad de retratar al principal socio de Pedro Sánchez, el mismo que llegó a Moncloa abanderando el feminismo y la lucha contra el machismo con una confluencia de fuerzas de izquierda entre las que se encontraba la de Errejón. No obstante, Feijóo se limitó a transmitir su apoyo a las víctimas de violencia sexual y reprochar al Gobierno de Sánchez su respuesta.
"Las víctimas ya vieron cómo sus agresores eran excarcelados y beneficiados por la ley del solo sí es sí y nosotros estuvimos ahí para defenderlas porque era nuestro deber. Ahora vuelven a sufrir, no solo los hechos, sino su encubrimiento y nosotros vamos a seguir defendiéndolas porque es nuestro deber. Es lamentable que el Gobierno de España solo pueda ofrecerles su hipocresía. Y es que solo para eso han quedado", señaló el popular ante la plana mayor de su partido y sus presidentes autonómicos sin llegar a mencionar de forma explícita al ahora ex portavoz de Sumar.
Y es que, como ha ocurrido veces anteriores, el PP busca evitar a toda costa dar motivos que unan a la izquierda en su propósito común de acabar con la derecha. Así lo explicaban este lunes las mismas fuentes que hace un par de días urgían a que Díaz diera una rueda de prensa para dar explicaciones y acusaban tanto a su formación como a la de Podemos de "conocer y tapar" los comportamientos del diputado.
Por el contrario, los barones que acudieron al Comité Ejecutivo Nacional del PP fueron más contundentes. El presidente de Aragón, Jorge Azcón advirtió que estos comportamientos "no se arreglan con cuatro cursillos", como los que impartía la formación de Díaz como mecanismo de prevención de violencia machista. Otros barones se sumaron a exigir responsabilidades. Como el presidente de Murcia, Fernando López Miras quien asumió que "todo indica que el Gobierno de España estaba ocultando y amparando casos de acoso sexual, lo que hace que la situación del Ejecutivo sea inadmisible".
En ello coincidía el Grupo Parlamentario Popular antes y después de escuchar la rueda que ofreció Díaz tras reunirse con su grupo en el Congreso en la que admitió que había delegado en Más Madrid la denuncia de una mujer por tocamientos por parte del diputado en 2023. "Díaz ha afirmado que tuvo conocimiento hace un año de la primera denuncia contra Errejón, por parte de una mujer en una red social. Sin embargo, también ha declarado que nunca preguntó al ex portavoz por la veracidad de esta denuncia, algo que, según ella, sí hizo la pasada semana", sostienen fuentes parlamentarias cuya conclusión es que la líder de Sumar "ha reconocido que hace un año de forma deliberada decidió no sólo tapar sino ignorar el testimonio de una mujer que afirmaba haber sido víctima de Errejón e imponer un manto de silencio en su formación para ascenderle a un puesto de la relevancia de la portavocía parlamentaria de uno de los dos partidos del Gobierno".
Ante ello, los populares registraron este lunes una pregunta por vía de urgencia que aspiran a formular en la sesión de control del miércoles: "¿Cómo afecta a la estabilidad del Gobierno que el ex portavoz de Sumar, partido de la coalición de gobierno, se enfrente a graves acusaciones penales?". Para los populares esta pregunta servirá para tantear en qué sendero se mueve el Gobierno: "Si este o sus socios parlamentarios vuelven a vetar esta modificación del Grupo Popular, como ya hicieron hace dos semanas con una batería de preguntas sobre la corrupción que cerca a Pedro Sánchez, su partido y su entorno personal, se confirmará que este Ejecutivo subsiste por la clamorosa omertá ante los escándalos de corrupción económica, política y moral que le sacuden".