Un equipo de investigadores de la Escuela Politécnica Federal de Lausana (EPFL) en Suiza ha desarrollado una mano articulada capaz de aumentar el alcance de un brazo robótico. Lo que más llama la atención de esta innovación es que puede desprenderse y desplazarse por sí sola para agarrar objetos.
La investigación, llevada a cabo en el Laboratorio de Sistemas y Algoritmos de Aprendizaje (LASA) de la EPFL, fue presentada recientemente en la Conferencia Internacional de Robótica y Automatización (ICRA).
Una mano robótica autónoma y ‘humana’
Según informan desde TheVerge, el propósito de este proyecto era desarrollar una mano robótica bimodal que pudiera ampliar sus capacidades de agarre, incluyendo la posibilidad de actuar sin depender del brazo al que está conectada. Debido a su potencia y rapidez, los brazos robóticos suelen estar fijos a superficies o estructuras para proporcionar mayor estabilidad, lo que limita su radio de acción. En cambio, las manos robóticas se diseñan con el único propósito de sujetar objetos.
Sin embargo, los científicos querían crear una que pudiera cumplir con esta función y también moverse de forma autónoma. Para ello, emplearon un algoritmo genético, que se inspira en principios biológicos como la evolución y la selección natural, además del simulador de física “MuJoCo”, con el fin de probar diferentes versiones del diseño básico y evaluar su viabilidad.
Utilizando esto, los investigadores determinaron que la configuración óptima incluía cinco dedos articulados, organizados como una mano humana. Además, incorpora un conector magnético en la muñeca que permite que la mano se conecte y desconecte del brazo robótico de manera autónoma. Los dedos de esta mano pueden doblarse en ambas direcciones, lo que permite que algunos de ellos se utilicen para agarrar objetos, mientras que los restantes funcionan como pequeñas extremidades que le permiten moverse.
No solo extiende la funcionalidad de la mano cuando está separada, sino que también mejora su capacidad cuando sigue acoplada al brazo, ya que puede manipular múltiples objetos al mismo tiempo sin necesidad de reposicionarlo. Robots como el Spot de Boston Dynamics podrían beneficiarse de soluciones como esta, ya que les permitiría explorar o analizar áreas de complicado acceso, donde sus capacidades actuales no le permiten llegar.