La defensa del abogado de Carles Puigdemont, Gonzalo Boye, ha presentado un escrito ante el tribunal de la Audiencia Nacional, que le juzga desde este lunes por un presunto delito de blanqueo de capitales en la 'Operación Mito'. El texto aporta registros migratorios que demostrarían que nunca tuvo lugar una reunión entre el narcotraficante José Ramón Prado Bugallo, conocido como Sito Miñanco, el letrado y el encausado Pedro González Rubio.
En el escrito del Ministerio de Relaciones Exteriores de Colombia, se recogen hasta 16 movimientos migratorios de González Rubio -presunto 'correo humano' de la organización de Sito Miñanco- que demostrarían que estuvo en el país sudamericano del 10 al 21 de febrero de 2017. Por lo tanto, no pudo estar en el despacho de Gonzalo Boye en Madrid el 14 de febrero, como sostenía el fiscal durante la instrucción.
Boye ha llegado a la Audiencia Nacional arropado por una veintena de dirigentes de Junts, para quienes el juicio contra él por presunto blanqueo de capitales es "un montaje con claras motivaciones políticas". El portavoz de la formación, Josep Rius, ha señalado que la acusación contra el letrado de Puigdemont es "un montaje con claras motivaciones políticas".
La Audiencia Nacional ha iniciado este lunes el juicio al cerca de medio de centenar de acusados en esta causa, entre ellos el histórico traficante gallego, para quien la Fiscalía pide 31 años y seis meses de prisión. En concreto, se le acusa del intento de introducción en España de casi cuatro toneladas de cocaína procedente de Sudamérica, la ocultación de más de 11 millones de euros y el blanqueo del dinero.
Boye, por su parte, se enfrenta a una petición de la Fiscalía de nueve años y nueve meses de prisión y a una multa de 2,7 millones por supuestos delitos de blanqueo de capitales y falsificación de documento oficial. Boye fue procesado por su presunta participación en un operativo con el objetivo de recuperar 889.620 euros que la Policía había incautado a miembros de la organización de Sito Miñanco en el aeropuerto de Madrid-Barajas en febrero de 2017.
Según la investigación, los narcos habrían contactado con Boye y con otro abogado, Jesús Morán Castro, para que elaboraran unos documentos que justificaran el origen legal del dinero. De este modo, Boye y otros dos letrados se sientan en el banquillo por su presunta implicación en la elaboración de documentos y contratos de compraventa de letras de cambio para recuperar el dinero aprehendido por la Policía.
El origen de la causa
Tras acabar con las cuestiones previas, ha tenido lugar la testifical del inspector que elaboró el primer oficio que dio pie a la apertura de esta causa. El jefe policial que coordinó la 'Operación Mito' entre 2016 y 2018 ha declarado que Boye dirigió trámites para que la red de Sito Miñanco recuperara casi 900.000 euros que le fueron incautados en el aeropuerto de Madrid-Barajas.
Así, ha recordado que la investigación se inició en 2016 cuando la Policía Nacional observó que la organización de Sito Miñanco estaba "volviendo a trabajar". El narcotraficante aprovechaba que se encontraba en régimen abierto en el centro penitenciario de Algeciras (Cádiz) -donde cumplía una condena por otra causa de drogas- para retomar su actividad delictiva.
"Sito Miñanco es un empresario del tráfico de drogas y no ha habido en España nunca una organización tan potente como la suya, y tenía expertos en todo, hasta de telecomunicaciones, un astillero -en Cambados (Pontevedra)- donde fabricaban sus propias embarcaciones y abogados", ha destacado el inspector, que ha calificado a Prado Bugallo de "gran líder".
"Se juntaba con gente con una historia de antecedentes bastante significativa", ha recordado, para añadir que iba mucho a Marbella. Esto "desencadenó" la operación policial porque esa ciudad andaluza "es un centro internacional de tráfico de drogas", donde están ubicadas "las mayores organizaciones y las más poderosas del mundo en relación con el tráfico de drogas".
"Se pudo verificar que había movimientos y hechos que (...) unidos indicaban que efectivamente podían estar trabajando nuevamente", ha explicado. Además, ha explicado que si bien estaba en tercer grado y tenía que trabajar en un parking, "se estaba desplazando de forma habitual a Madrid".
Por otro lado, ha resaltado que el narco gallego le daba mucha importancia a la comunicación con las personas implicadas: "A él le gusta estar pendiente de todo y controlarlo absolutamente todo (...), controla exactamente todo lo que hace cada una de las personas implicadas". "Es una persona muy tenaz, es un gran líder, es una persona muy profesional y, aunque yo creo que trata bien a la gente, es muy serio y le gusta que la gente sea responsable, pega unas buenas broncas al que no cumple", ha asegurado el inspector.
Boye dirigía los trámites para justificar el dinero
El inspector ha recordado que el 5 de febrero de 2017 fueron confiscados en el aeropuerto de Madrid a cinco de los acusados casi 900.000 euros de la organización de Sito Miñanco cuando se disponían a viajar a Colombia para realizar pagos a los suministradores de droga. Una de las personas que llevaba parte del dinero, el acusado Manuel G.R, manifestó en Aduanas del aeropuerto que era dinero de su empresa, pero el inspector ha asegurado que "es mentira".
"Al incautarse el dinero perdieron los nervios y comenzaron a decir que había que recuperarlo y contactaron con abogados, que no les ayudaron desde el punto de vista legal, sino que falsearon documentos para recuperar el dinero mediante el uso de unos pagarés que ya fuero usados para justificar otras cantidades ya incautadas en una operación de narcotráfico anterior", ha explicado. Según el inspector, Gonzalo Boye era el abogado que dirigía los trámites para justificar el dinero intervenido.
Por otra parte, ha destacado que el 2 de octubre de 2017 fue abordado en Las Azores el buque Thoran, en el que se incautaron 3.305 kilos de cocaína procedente de Ecuador que la organización compró a suministradores colombianos. Y ha añadido que el 9 de noviembre siguiente le fueron intervenidos 615 kilos de la misma droga en un almacén en Países Bajos.
"Una acusación totalmente especulativa"
A su salida de la Audiencia, Boye, que ha representado a Sito Miñanco como abogado en otros casos, ha declarado a los periodistas: "Estoy aquí acusado por hacer mi trabajo como abogado". Además, ha indicado que se ha vulnerado durante el procedimiento el secreto profesional y el derecho a la defensa por los registros en su despacho profesional.
"El mismo fiscal que tiene paralizado la investigación del caso Koldo es el que pidió en su día que se interviniesen todas mis comunicaciones entre abogado y cliente sin discriminación alguna, desde un caso de divorcio hasta de derechos humanos, lo que ha vulnerado el secreto profesional y el derecho de defensa", ha añadido.
Ha recalcado que se trata de "una acusación totalmente especulativa" y que este lunes ha aportado "más pruebas que demuestran que los hechos no son como los plantea el Ministerio Fiscal". "Sostiene su acusación solo en base a un presunto asesino que cambió su declaración a cambio de salir en libertad".