Rafa Nadal se despidió ayer en el penúltimo capítulo de su carrera en el Six Kings Slam, el último torneo individual disputado como profesional. Era una exhibición, sí, pero tras caer con Djokovic en la pelea por el tercer y cuarto puesto, Nadal tuvo un trofeo de reconocimiento y una regalo muy especial único para él: una raqueta de oro.
Sí como lo leen, no una raqueta dorada o un trofeo cromado con forma de raqueta, una raqueta de oro macizo de tamaño real fue el regalo que la organización del 'Six Kings Slam' hizo a Rafael Nadal al término del partido contra el serbio Novak Djokovic, por el tercer y cuarto puesto del torneo de exhibición en Riad.
Una vez concluido el choque con la victoria del serbio y tras los discursos de rigor de ambos protagonistas, legendarios, que firmaron su último clásico, Turki Al sheikh, asesor de la Corte Real de Arabia Saudí, que presidió la competición, hizo entrega de un maletín al español, que, al abrirlo, se encontró con una impactante raqueta de oro.
Antes, la organización había reconocido el recorrido y la carrera del legendario deportista español, ganador de veintidós títulos del Grand Slam, que agradeció "a la organización estos días increíbles y uno de los públicos más apasionados".
Además del trofeo de cuarto clasificado y del obsequio de oro, Nadal (embajador del tenis en Arabia desde el año pasado) recibió una cuantiosa suma económica tan solo por comparecer en los dos partidos disputados ante Alcaraz y Djokovic.
