Caleb Olson es un inventor de Minnesota que ha desarrollado un dron autónomo para recoger excrementos de perro de forma automática y aérea, llamado "Poopcopter". Sí, has leído bien.
Está diseñado para patrullar áreas específicas en busca de excrementos caninos y utiliza visión tiempo real junto con algoritmos de IA con aprendizaje automático para detectar los excrementos, y recogerlos con precisión.
Podemos decir tranquilamente que es el primer sistema del mundo en recogida de cacas de perro a través de un dron.
El dron que detecta y limpia los excrementos de los perros
El Poopcopter cuenta con un contenedor en forma de campana equipado con hojas dentadas que permite recoger los desechos de manera eficiente. El proceso comienza cuando el dron sobrevuela la zona asignada, escaneando el terreno en busca de excrementos. Las imágenes capturadas con la cámara se envían a la nube, donde se procesan utilizando algoritmos que identifican los desechos.
Según su inventor, esta ha sido una de las partes más complicadas porque los sistemas de drones se basan en el GPS y tienen una precisión de solo unos metros que no sirve para capturar objetivos tan pequeños. Una vez localizados, el dron aterriza cerca del objetivo y las hojas se abren para atrapar los residuos mediante un mecanismo de rotación.
Después, recoge el excremento girando 30 grados y cierra el contenedor. Tras recogerlos, el dron puede llevarlos a un lugar previamente designado o, si es necesario, girar en el aire para ir a otro punto. Su sistema recolección, que está pendiente de patente, ha sido impreso en 3D, lo que lo hace más accesible y económico. Olson está trabajando en su comercialización para que pueda estar al alcance de los consumidores.
Además, tiene planes de ampliar su uso, imaginando que los municipios puedan contratar servicios de limpieza aérea con camionetas equipadas con varios Poopcopters. Estos drones podrían llegar a patrullar vecindarios, recogiendo excrementos de manera automática y eficiente, y luego los depositarían en las camionetas para su disposición adecuada. Este proyecto ya está atrayendo a ciertos inversores y no sería nada descabellado ver a los Poopcopter sobrevolando nuestros barrios algún día.
