Marc Márquez ha empezado la temporada de MotoGP por todo lo alto: con una primera pole y llevándose la carrera al sprint. Lo ha hecho con una victoria sencilla en lo que ha sido su primera vestido de rojo con la Ducati. Y con su hermano Álex, que ha quedado segundo, pisándole los talones. En tercer lugar, ha quedado su compañero de equipo, 'Pecco' Bagnaia.
Sacaba el puño el piloto español al cruzar la línea de meta y nada más bajarse de la moto, se fundía en un abrazo con su hermano. Todo ello tras meterse con la victoria 12 puntos en el bolsillo, 9 para Álex y 7 para Bagnaia. El piloto catalán dominó de principio a fin una prueba en la que se distanció vuelta tras vuelta de sus rivales para conseguir una ventaja máxima de un segundo y medio sobre Álex.
Márquez, el cual no falló desde la salida, sonríe tras conseguir algo que no hacía desde 2019 y se lleva muy buen sabor de boca de cara a la carrera de mañana, en lo que está siendo un gran inicio de un nuevo curso en el que parte como favorito.
En una carrera en la que, en la séptima vuelta, se fue por los suelos, el australiano Jack Miller y Pedro Acosta aprovechó el error de Fabio Quartararo para superarlo y ganar la sexta plaza.
Asimismo, la sorpresa del día ha sido Ai Ogura, que en su primera cita corta en MotoGP ha sido cuarto. Este, junto con Franco Morbidelli, Pedro Acosta, Fabio Quartararo, Brad Binder y Joan Mir, han entrado en zona de puntos, por lo que las cinco marcas han conseguido estrenar sus casilleros en el día de hoy.
