Ni la cancelación sin previo aviso ni el tiempo pudieron evitar que el 12 de octubre del 2024 pasara del ser el día de la Hispanidad para convertirse en una celebración para todas las k-popers. Porque sí, el k-pop, la música surcoreana, es un fenómeno mundial que se ha asentado en España. Y es que, si bien esta no es la primera vez que un grupo de esta índole llega a tierras patrias, nunca antes se había contado con un festival de este nivel.
El Musik Bank World Tour es uno de los eventos a nivel mundial más grandes, y no es para menos. Sin embargo, su 19.ª edición estuvo a punto de no celebrarse por la negativa unilateral a menos de un mes por parte del Santiago Bernabéu, donde se celebraría en un primer lugar.
Las quejas de los vecinos por el ruido ambiental obligaron al evento a cambiar su escenario por el auditorio Miguel Ríos en Rivas Vaciamadrid. Un cambio que trajo consigo la pérdida de los asientos y la cancelación por parte de varios fans.
Aun así, 35.000 personas de hasta 87 nacionalidades diferentes pudieron disfrutar del espectáculo. Daba igual qué idioma se hablara, qué edad tuvieran o a cuál de los grupos era al que más ganas tenían de ver, todas y todos sus fans llevaban por bandera la ilusión de ver a sus ídolos y sus lightsticks para mandarles apoyo. Y es que como si de varitas mágicas se tratasen, los colores de todos ellos se convirtieron en el símbolo de rebelión ante la lluvia que acompañó de manera intermitente toda la tarde-noche del sábado.
De la mano de la cadena surcoreana KBS y presentado por el actor Park Bo-Gum se dio comienzo al festival cuyo tema era “los cazadores de sol”. Una temática llamativa cuanto menos teniendo en cuenta el clima. Sin embargo, aunque los trabajadores tuvieran que estar constantemente limpiando el escenario para que los intérpretes pudieran realizar sus elaboradas coreografías, todos los fans mostraron su apoyo en las más de cinco horas de evento.
Las actuaciones, divididas en bloques de dos grupos, contaban con cuatro canciones por banda. Las primeras en actuar fueron Kiss of live. Recién debutadas demostraron en su primera actuación en el país que habían llegado para brillar.
Cada uno de sus temas fue vitoreado con la intensidad de fans que llevan años siguiendo sus pasos, aunque en su caso las cuatro jóvenes se dieron a conocer allá por julio de 2023. Seguidas de ellas tocó el turno de P1Harmony, quienes lograron que todos los asistentes saltaran de emoción con su tema Jump.
La actuación de Riize, la tercera de la noche, llegó con el calor tanto de sus seguidores como de los fuegos del escenario, para posteriormente dar paso a una actuación especial de Solar, de Mamamoo+; Belle y Julie, de Kiss of live, interpretando el tema en Rosalía, Bizcochito. Aunque esta no sería la única canción en español de la noche, pues las miembros de Nmixx sorprendieron con tema Soñar.
En el ecuador de la noche llegaron Boynextdoor a demostrar que ellos eran icónicos, como así aseguran en su tema One and Only. Y es que aunque llegaron a pedir permiso a los padres de los asistentes más jóvenes para interpretar sus canciones más ardientes, lo cierto es que si alguien consiguió elevar la temperatura esa fue Solar con su interpretación en solitario. Su compañera en Mamamoo+ (subgrupo de Mamamoo), Moonbyul también interpretó un solo para unirse a ella en Hip.
Así, llegó un nuevo turno de actuaciones especiales en la que el cover de Can't Feel My Face del grupo The Weeknd por Heeseung, del grupo Enhypen se convirtió en un despliegue de talento. Daban ya las diez de la noche cuando Aespa subió al escenario. Las cuatro jóvenes, que volverán a España en mayo, devoraron el escenario con sus temas pegadizos y sus bailes perfectamente coordinados. Todo ello para llegar al momento cumbre, la actuación, ahora al completo, del grupo Enhypen.
Los 41 cantantes que pasaron por el escenario demostraron tener todo lo necesario para triunfar: talento y carisma. Todos ellos, sin excepción, interactuaron con su público, lanzaron besos, corazones y "te quiero" que llegaron hasta lo más profundo de sus fans.
Las pequeñas palabras en castellano que se chapurrearon y la conclusión común de que el público español (y no tan español) eran "los mejores" fueron el hilo conductor de la gala, que finalizó con completa puntualidad.
A las once de la noche, las fans, con el maquillaje corrido por las lágrimas, sus mejores estilismos aún tapados por los chubasqueros y las voces afónicas de tanto chillar, comenzaron la que sería su siguiente odisea: volver de nuevo a sus casas. En un evento de la magnitud del Musik Bank el transporte público no estuvo a la altura.
Metros y carreteras colapsadas, no había posibilidad de volver sin esperar de media más de una hora. No había manera de evitar el atasco y los taxis y VTC se convirtieron en un bien de lujo, tanto por la dificultad de poder llegar a pedir uno libre como por los precios a los que se vendían.
El segundo festival de K-pop en España se quedará en la mente de miles de personas durante mucho tiempo. Quizás por quienes pasaron la noche a la intemperie para poder ver de cerca a sus fans, por las que acabaron sin voz o empapadas por la lluvia.
Tal vez alguien al despertar el domingo recuerde que se dejó el paraguas o piense de no la mejor manera posible en los vecinos que imposibilitaron que se celebrara el evento en el Bernabéu. Pero, si hay algo que todos recordarán es que en Madrid, a pesar de todo, el sol brilló de noche un 12 de octubre con un sabor muy asiático.
