Un equipo de investigadores del Instituto Karolinska en Suecia ha identificado una molécula capaz de ayudar a la curación de los intestinos tras sufrir daños, al mismo tiempo que suprime el crecimiento de tumores en el cáncer colorrectal. Este descubrimiento sienta las bases para el desarrollo de nuevas terapias destinadas a tratar la enfermedad inflamatoria intestinal (EII) y el cáncer de colon.
Ante la falta de respuesta de muchos pacientes con EII, como la enfermedad de Crohn o la colitis ulcerosa, a los tratamientos disponibles, surge la necesidad de buscar nuevas estrategias terapéuticas. En un estudio publicado en la revista "Nature", los científicos sugieren que promover la regeneración de la mucosa intestinal podría ser una alternativa eficaz a los fármacos inmunosupresores convencionales.
Sin embargo, este enfoque conlleva el riesgo de inducir el crecimiento descontrolado de tumores, ya que las células cancerosas pueden aprovecharse de los procesos naturales de curación del organismo.
El autor principal del estudio, Srustidhar Das, especialista en investigación del grupo liderado por Eduardo Villablanca en el Departamento de Medicina del Instituto Karolinska, destaca: "Ahora hemos identificado una molécula que puede ayudar a los intestinos a sanar después de un daño al mismo tiempo que suprime el crecimiento de tumores en el cáncer colorrectal".
Activación del receptor X del hígado (LXR)
Los investigadores han descubierto que la activación de una proteína llamada receptor X del hígado (LXR) puede promover la regeneración tisular y, a su vez, inhibir el crecimiento tumoral en el cáncer colorrectal. Eduardo J. Villablanca, docente del Instituto Karolinska y último autor del estudio, afirma: "El descubrimiento de ambas funciones fue sorprendente. Ahora necesitamos estudiar más de cerca cómo LXR controla la formación de tumores".
Tecnologías avanzadas empleadas en el estudio
Para llevar a cabo esta investigación, el equipo recurrió a una serie de técnicas vanguardistas, como el mapeo del transcriptoma de las células intestinales y el cultivo de organoides 3D, pequeñas estructuras celulares tridimensionales que imitan la función y la estructura de los órganos a escala miniatura.
Además, aplicaron la transcriptómica espacial para mapear la expresión genética en los diferentes tejidos, una metodología desarrollada en SciLifeLab por científicos del Royal Institute of Technology (KTH) y el propio Instituto Karolinska.