Silencio absoluto de Íñigo Errejón. Desde que renunciara a través de sus redes sociales como portavoz de Sumar en el Congreso y abandonara la política tras las acusaciones de violencia sexual lanzadas en redes sociales, el exdiputado se mantiene ausente y no ha hecho ninguna declaración pública, lo que ha disparado interrogantes sobre su paradero y sus próximos pasos. Mientras tanto, el Congreso ha confirmado que ya no es diputado, por lo que el Juzgado de Instrucción número 47 de Madrid ya podrá estudiar la denuncia de la actriz Elisa Mouliaá. Entre tanto, continúan surgiendo nuevos testimonios de presuntas víctimas.
La última vez que se vio a Errejón de forma pública fue este viernes, cuando fue captado por primera vez tras su dimisión. El exportavoz de Sumar salía de su domicilio y se metía rápidamente en un coche que le esperaba en la puerta, sin emitir palabra alguna a la prensa que aguardaba fuera de la vivienda. Según ha podido saber La Sexta, desde entonces no se encuentra en su casa y tampoco se espera que vuelva a corto plazo.
A pesar de su desaparición pública, en su perfil de X (antes Twitter) aún figura como título "Portavoz de Sumar en el Congreso" y, en su Facebook, "Diputado de Más País en el Congreso de los Diputados", detalles que todavía no ha modificado. No obstante, la Cámara baja ha confirmado ya al juez Adolfo Carretero -que lleva la denuncia de Mouliaá- que Errejón ha renunciado a su acta, con lo que ya no está aforado ante el Tribunal Supremo.
Los diputados (tanto autonómicos como nacionales), senadores, y otros altos cargos están aforados ante el alto tribunal y es el único que puede investigarlos. Por ello, para asumir la investigación contra Errejón por un presunto delito de acoso sexual, el juez debía cerciorarse de que el político había abandonado oficialmente su cargo y que, por tanto, había perdido su aforamiento.
Su padre asegura que desconoce su paradero
A quien sí se ha visto públicamente estos días ha sido a José Antonio Errejón, padre del exportavoz de Sumar, y el único de la familia que ha roto el silencio para defenderle en varias declaraciones realizadas este viernes. "Yo estoy al 100% convencido de que no tiene nada que ver con eso", aseguró con firmeza al programa En boca de todos. Asimismo, también quiso enfatizar que el carácter de su hijo es incompatible con las acusaciones que se están publicando: "Cualquiera que le conozca sabe que él es la antítesis de esto".
Preguntado por su paradero, José Antonio Errejón aseguró que no sabía dónde se encontraba. "No he podido hablar con él, le hablé cuando me enteré de esto para preguntarle", explicó sin ofrecer más detalles sobre si ha recibido alguna respuesta o señal. De este modo se mantiene la incógnita sobre la ubicación de Errejón, quien no ha salido ni para desmentir ni para confirmar las acusaciones contra él.
En el último mensaje que envió a un canal común de Sumar en Telegram, Errejón sentía lo ocurrido y expresaba su satisfacción por haber trabajado con los diputados de esta coalición. "Ha sido un orgullo trabajar con vosotros compañeros. Siento el perjuicio", recogía el exportavoz parlamentario en un breve texto.
Por otro lado, su última publicación en X previa al comunicado de la dimisión fue un vídeo compartido el día de antes en el que daba declaraciones sobre un acuerdo contra los abusos de la banca a familias hipotecadas. "Las cosas claras. Somos quienes hacemos avanzar la agenda social: llegando a acuerdos y extendiendo derechos. Para eso estamos y por eso hay legislatura", escribió.
Aparecen más casos
En contraste con el silencio de Errejón, más presuntas víctimas están alzando la voz y continúan apareciendo testimonios anónimos de casos de violencia machista sobre el exdiputado compartidos por Cristina Fallarás en su Instagram. La escritora ha señalado este lunes que al menos dos mujeres más le han trasladado este fin de semana su intención de denunciar ante la Policía.
La periodista ha admitido, sin embargo, que "lo más normal es que se echen atrás" después de ver el "linchamiento" contra Mouliaá, la única mujer que por ahora ha dado el paso de denunciar ante los tribunales. A este respecto, Fallarás ha lamentado que la actriz, por el único hecho de denunciar a su agresor, esté siendo "linchada de una manera brutal" y viviendo "un calvario". "Luego nos preguntan por qué no denunciamos", ha apostillado.