Estamos asistiendo estas semanas a una tragedia casi vivida en vivo y en directo. Al dramatismo de la situación y de las imágenes se une la maravillosa solidaridad de los ciudadanos y ciudadanas que ayudan con su esfuerzo, su aliento y su entrega a que la coyuntura vaya mejorando.
Las personas damnificadas y los voluntarios siguen por desgracia en unas condiciones físicas e higiénicas muy penosas. Y somos muchos los laboratorios que estamos colaborando en el envío solidario de productos de higiene y de limpieza.
A la falta de agua potable se une la mala alimentación por la dificultad de cocinar y de conseguir alimentos frescos, junto al cansancio extremo y la constante presencia de la suciedad y el barro.
El peligro del barro tóxico
Este barro y esta suciedad que todo el mundo se esfuerza en eliminar para poder volver a sus vidas normales puede ser la fuente de muchos problemas sanitarios.
El barro es por desgracia un excelente medio para que los microorganismos crezcan y se desarrollen. Muchas enfermedades se propagan . amparadas por la humedad constante, los organismos en descomposición y la presencia de aguas fecales.
Además al manejar esta sustancia tan espesa y opaca es fácil cortarse o tropezar y ese tipo de heridas se infectan con enorme facilidad. El tétanos y otras bacterias penetran en la piel. Es muy importante ir muy protegidos y en el caso de aparecer cortes o rozaduras lavarse la piel con abundante agua y jabón, poniéndose desinfectante. Y en caso de duda consultar sobre la vacuna antitetánica.
La humedad constante en la piel
Otro problema es el de la piel macerada y húmeda durante mucho tiempo. Esta humedad, combinada con productos de desecho, ocasiona frecuentemente infecciones por hongos. Para evitarlos hay que procurar no estar mucho tiempo con la ropa húmeda pegada a la piel, retirándola y lavándose con agua y jabón y secándose después cuidadosamente
Un gran riesgo esta producido por la posibilidad de aspirar los microorganismos que se encuentran en el barro y que pueden pasar a los pulmones o depositarse en los ojos produciendo infecciones que pueden ser graves. Por eso la importancia de utilizar mascarillas protectoras y gafas, intentando minimizar el riesgo.
El estrés y la ansiedad están por desgracia teniendo una presencia cada vez más patente entre los habitantes de estas poblaciones valencianas. La devastación, el desamparo y la terrible falta de medios, generan una angustia que incide en nuestro cuerpo con niveles de Cortisol muy altos.
Finalmente hay un déficit generalizado en las poblaciones afectadas por la muchas veces deficiente calidad de la dieta. Se ha hecho muy difícil conseguir fruta y verdura fresca que además no se pueden lavar, porque el agua no es potable. Si además estamos ante colectivos mas débiles como los niños, los ancianos o los enfermos los problemas se pueden magnificar. Es importante consultar a su medico o farmacéutico sobre el uso de vitaminas o batidos de proteínas que complementen esta dieta deficiente.
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