Cada vez sabemos más sobre alimentación y nutrición, tenemos acceso a una mayor cantidad de información sobre algunos alimentos y superalimentos, lo que nos ayuda a tener conciencia sobre lo que incluimos y excluimos de nuestra lista de la compra, lo que nos invita a hacerlo de una manera consciente y responsable. También nos ayuda a conocer un poco más las propiedades de esos alimentos típicos en España que, por ser tan habituales, ignoramos que comerlos puede proporcionarnos grandes beneficios.
Conocer las propiedades de algunos alimentos puede ayudarnos a tomar la decisión de meterlos en el carro de la compra de forma habitual, dejarlos para ocasiones especiales o evitarlos en la medida de lo posible. Esto es lo que puede pasarnos con el pepino, un ingrediente en el que tal vez no habíamos pensado salvo para elaborar alguna receta concreta, pero que puede convertirse en un indispensable una vez que conozcamos todo lo que puede hacer por nosotros y nuestra salud, siempre, por supuesto, que se consuma con moderación y en el marco de una dieta saludable y equilibrada.
Beneficios del pepino en la alimentación
A pesar de ser un alimento habitual, el pepino es un gran desconocido, porque los beneficios que puede aportar su consumo a nuestra salud no son siempre de dominio común, más allá de sus virtudes para perder peso, por ser un alimento ligero, bajo en calorías, rico en agua (casi el 95% del pepino es agua, lo que lo convierte en un estupendo diurético) y también en fibra, lo que ayuda a aumentar la saciedad, reduciendo el apetito entre comidas por más tiempo. Sin embargo, el pepino es mucho más que el alimento que incluimos cuando queremos adelgazar, también tiene muchos beneficios.
El pepino contiene una gran cantidad de nutrientes, una pequeña cantidad de vitamina C, provitamina A, pero sobre todo vitaminas del grupo B, también minerales como el ácido fólico, calcio, hierro o magnesio.
Gracias a las cantidades de fibra que contiene y los antioxidantes, ayuda a cuidar la salud cardiovascular, favoreciendo la disminución de grasas, como los triglicéridos y el colesterol LDL (o malo). Es también rico en agua, magnesio y potasio, que ayudan a reducir la presión arterial, favoreciendo la eliminación del exceso de sodio a través de la orina.
Mejora la digestión y alivia el estreñimiento, más si se consume con la piel. Además, los pepinos contienen sílice, que ayuda a fortalecer las uñas y el cabello, es importante para la formación del colágeno y contribuye a la densidad mineral ósea. Ayuda a mantener la salud ósea gracias a la vitamina K que contiene.
¿Tiene contraindicaciones el consumo de pepino?
Lo cierto es que tomar pepino es bastante seguro, siempre que se consuma sin excesos, incluyéndolo en una alimentación variada y no pensando que podemos conseguir todos sus beneficios consumiendo solamente este alimento. Sí que es cierto que, por su alto contenido en fibra sí que se desaconseja tomarlo en caso de diarrea o indigestión, porque podría agravar el malestar. Además, deberían moderar su ingesta las personas que toman anticoagulantes, por sus altos niveles de vitamina K.
En algunas ocasiones, si se abusa de su consumo, podría causar una pérdida de minerales, por sus cualidades diuréticas, con las que eliminamos toxinas, pero también otras sustancias, lo que podría producir fatiga muscular y decaimiento.
Referencias
FoodData Central. (s. f.). https://fdc.nal.usda.gov/fdc-app.html#/food-details/168409/nutrients