La representación de España en el estamento arbitral en la Eurocopa ha pasado a ser prácticamente nulo una vez finalizada la fase de grupos del torneo continental de selecciones europeas. 5 colegiados españoles viajaron a Alemania para ser jueces de campo en la competición, pero solo uno se quedará para los octavos de final.
La gran cara visible entre estos cinco árbitros ha sido Jesús Gil Manzano, acompañado de sus dos asistentes, Diego Barbero Sevilla y Ángel Nevado Rodríguez. Por otra parte, el Comité Técnico de Árbitros (CTA) eligió a dos representantes para el VAR, Alejandro Hernández Hernández y Juan Martínez Munuera.
Este último será el único representante de la comitiva española que permanezca en Alemania para la fase de eliminatorias, mientras que los otros cuatro no tendrán más compromisos en esta Eurocopa.
Gil Manzano solo arbitró un partido, el Francia - Austria de la primera jornada en el Grupo D, un encuentro cargado de polémica por el único tanto, un autogol de Maximilian Wöber, en una jugada de la selección francesa que comenzó con un saque de puerta que debió haber sido córner para los austriacos.
El extremeño no volvió a estar a cargo de ningún partido, actuando, eso sí, como cuarto árbitro en el Turquía - Portugal de la segunda jornada, pero esta decisión por parte de la UEFA supone un gran paso atrás para el arbitraje español en relación con otros países: Italia, Francia o Inglaterra han podido llevar a dos colegiados principales, mientras que Michael Oliver o Szymon Marciniak ya han regido sobre dos partidos de la fase de grupos, y volverán a empuñar el silbato en los octavos de final.
