Más de una semana después de la DANA que arrasó buena parte de la Comunidad Valenciana y algunas zonas de Andalucía y Castilla-La Mancha, los expertos comienzan a analizar detenidamente las causas atmosféricas que provocaron los récords de precipitaciones que han hecho de este fenómeno la peor catástrofe del siglo en España.
Según el Centro de Estudios Ambientales del Mediterráneo (CEAM), fueron cinco las causas que estuvieron detrás de esta histórica DANA. Así se explica en un informe que afirma que "podemos hablar de un temporal histórico, entre los tres más intensos del último siglo en la Comunitat Valenciana". Te contamos cuáles son estos factores que han potenciado la magnitud de las inundaciones, según el CEAM:
1. Intensidad y duración de la DANA
Además de profunda, la DANA fue acompañada de una gran cantidad de aire frío en niveles medios y altos de la troposfera, creando un gran contraste vertical de temperatura. Además, por si fuera poco, la gota fría fue excepcionalmente longeva, basculando entre la Península y Marruecos durante más de ocho días.
Además, según añaden desde Meteored añaden, el posicionamiento de la gota fría era ideal para la génesis de las lluvias torrenciales, quedando la costa mediterránea en la zona delantera, la más activa en cuanto a tormentas, en la fachada mediterránea peninsular.
2. Altas temperaturas del agua del mar
Las aguas del Mediterráneo han mantenido temperaturas significativamente superiores a la media durante meses, con episodios de olas de calor marinas, provocando un incremento de la humedad disponible en el aire sobre la costa este de España. Este mar cálido se traduce en un incremento de la tasa de evaporación que ha intensificado las precipitaciones en la región, desencadenando lluvias torrenciales sostenidas.
3. Mayor humedad y vientos de levante
La acumulación de calor en el Mediterráneo, así como la posible presencia de un río atmosférico de origen atlántico subtropical, ha incrementado el agua precipitable en la atmósfera, creando condiciones ideales para lluvias intensas.
De este modo, con aire frío en altura y flujo constante de humedad desde el mar, se formaron núcleos convectivos profundos que generaron precipitaciones intensas y concentradas. El viento de levante, además, intensificó el desarrollo de estas tormentas, manteniéndolas activas durante más de 12 horas en una misma zona.
4. Lluvias torrenciales localizadas
Durante el episodio, localidades como Chiva registraron precipitaciones extremas de hasta 491,2 litros por metro cuadrado en solo 8 horas. La distribución localizada y la intensidad de la precipitación en tan poco tiempo provocó una fuerte escorrentía y acumulación de agua, recogida por ríos y barrancos que provocaron su desbordamiento y causaron inundaciones urbanas, afectando gravemente a viviendas, carreteras y servicios básicos en diversas áreas.
5. La influencia del cambio climático
El cambio climático está aumentando la frecuencia e intensidad de estos fenómenos en la cuenca mediterránea. El aumento de temperaturas en el mar y la atmósfera crea un ambiente favorable en el periodo otoñal para episodios de lluvias extremas y repentinas. Este contexto climático añade un elemento de mayor riesgo y persistencia a los episodios de DANA en la región, amplificando sus impactos en áreas vulnerables.