España tiene problemas a la hora de controlar la gestión de los fondos anticrsis de la Unión Europea. Ese es el aviso que han puesto sobre la mesa los auditores tras el informe sobre la ejecución de fondos en 2023 elaborado por el Tribunal de Cuentas Europeo, que se ha hecho público este jueves. Entienden, eso sí, que el Gobierno "está en vías de solucionarlo", pero todavía tiene "deficiencias" el sistema que se aplica. Este, "no contiene información completa sobre el progreso de hitos u objetivos incumplidos ni sobre titulares reales, fuentes de financiación de la UE e importes pagados", explican en el documento.
En este sentido, avisan de que sigue habiendo "fallos" que se dieron en 2022 y todavía no se ha resuelto del todo un problema que viene ya de 2021, cuando se dio el primer desembolso de los fondos de recuperación de la UE, de los que España es junto a Italia el principal beneficiario.
Este aviso llega solo un día después de que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, presumiera ante el Congreso de que España es el Estado miembro de la UE más avanzado en la ejecución de los fondos de recuperación. El control, tal como alertan los auditores, no es todo lo completo que debería. Asimismo, la Comisión Europea pretende que la mayoría de fondos, en el próximo presupuesto plurianual, se centralicen todavía más en los Gobiernos centrales, algo que las CCAA rechazan, tal como dejó claro por ejemplo el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, en su visita de esta semana a Bruselas.
Con todo, España es el país con mayor número de hitos y objetivos cumplidos en términos absolutos, según recuerdan desde el Ejecutivo. España es también el país que más transferencias de la UE ha recibido, con un total de casi 48.000 millones de euros.
El informe de los auditores es, además, muy duro con la UE en general. "Como en años anteriores, el nivel estimado de error en el gasto del presupuesto de la UE ha aumentado", según el informe anual. Los auditores también advierten de los "crecientes riesgos financieros a los que se enfrenta el presupuesto de la UE" debido a un volumen récord de deuda, la invasión rusa de Ucrania y la elevada inflación.
Aunque los auditores concluyen que las cuentas de la UE para el ejercicio 2023 ofrecen "una imagen veraz y fiel, y que las transacciones de ingresos pueden considerarse exentas de errores", les preocupa el aumento del nivel de error hasta el 5,6% (frente al 4,2% de 2022), que afecta a los 191.200 millones de euros de gasto del presupuesto de la Unión. Además, las irregularidades afectan a una parte de los 48.000 millones gastados con cargo al Mecanismo de Recuperación y Reactivación (MRR), el principal pilar del paquete de medidas de la UE en el marco de los fondos Next Generation. Los auditores detectaron pagos para los que no se cumplían todas las condiciones, así como deficiencias en los sistemas de control de los Estados miembros, entre ellos el español.
Al igual que en los últimos cuatro años, los auditores concluyen que el nivel de error estimado era significativo y generalizado, por lo que han emitido un dictamen desfavorable sobre el gasto de la UE en 2023. Los auditores destacan que el aumento sustancial de la tasa de error estimada "se debe en gran medida a los errores detectados en los gastos de Cohesión, que alcanzan el 9,3 % (fue de un 6,4% el año anterior). Hacen referencia a la presión de tiempo que sufren las administraciones nacionales para gastar dinero procedente de fondos de la UE competidores a estos como posible razón de sus dificultades para garantizar una financiación adecuada de los proyectos de Cohesión.
"A medida que nos acercamos a la mitad del período financiero 2021-2027, las conclusiones de nuestro informe anual ponen de relieve los retos críticos a los que se enfrenta el presupuesto de la UE, incluidos los elevados niveles de gasto irregular", explicó el presidente del Tribunal de Cuentas Europeo, Tony Murphy. "Estos retos ponen de relieve la necesidad de estructuras sólidas de supervisión y rendición de cuentas, tanto a nivel de los Estados miembros como de la UE, con el fin de mantener la confianza de los ciudadanos y salvaguardar los futuros presupuestos de la UE", concluye.
Desde la Comisión Europea no comparten los avisos del Tribunal. Este primer mandato de la Comisión Von der Leyen estuvo marcado, recordó Bruselas en un comunicado, por una serie de crisis sin precedentes que han exigido "soluciones rápidas y eficaces para proteger las vidas y los medios de subsistencia en la UE", expuso el comisario europeo de Presupuesto, Johannes Hahn, en referencia a la pandemia y al impacto de la guerra de Moscú contra Kiev. La UE siguió haciendo frente a los desafíos a medida que surgían", terminó Hahn.
