Una forma sencilla de tomar fruta es en forma de zumo, una manera que no conviene que sea la más habitual porque no es la más saludable, pero que en ocasiones hace que aumentemos la ingesta sin apenas darnos cuenta, sumando así también vitaminas y minerales. Lo ideal es tomar la pieza entera, pero si se escoge tomar zumo, siempre será mejor que sea recién exprimido que envasado. De hecho, en muchos establecimientos en España no es raro que tengan máquinas exprimidoras para que el zumo de naranja sea natural, no solo en bares y cafeterías, también en comercios.
Si a pesar de eso ha ganado el zumo envasado en esta batalla, es importante escoger aquel que sea lo más natural posible, que tenga la menor cantidad de azúcares posible y la mayor cantidad de fruta, algo que no siempre es sencillo de saber. Para que resulte más sencillo, los japoneses emplean un truco que les ayuda a conocer la cantidad de fruta que tienen esos zumos y que les resulta muy útil a la hora de seleccionar cuál comprar y cuál dejar en la tienda.
El truco para conocer la cantidad de fruta que tienen los zumos envasados
En Japón hay muchas bebidas enlatadas y embotelladas, pero no todas ellas contienen la misma cantidad de fruta. Eso sí, solo si la bebida contiene zumo en su totalidad, es decir, solo si contiene el 100% de fruta les permiten poner en la etiqueta una imagen de la fruta cortada. En caso de que la fruta que aparece en la etiqueta esté entera, se sobreentiende que el porcentaje de fruta del zumo está entre el 5% y el 99,9%. Además, en caso de que en lugar de una fotografía, lo que aparezca sea un dibujo, entonces el porcentaje será inferior al 5%.
Esto no es una norma que sea extrapolable a España, en Japón tienen obligación de respetarla y así es como dejan claro la cantidad de zumo de fruta que contiene la bebida, pero en nuestro país para saberlo es necesario mirar la etiqueta. Esta es una norma aprobada hace mucho tiempo, en la etiqueta debe aparecer la cantidad de zumo que contienen las bebidas.
Zumo, ¿un buen sustituto de la fruta fresca?
Como señalábamos antes, sustituir la ingesta de frutas y verduras por zumos no es la mejor de las ideas, emplearlo como complemento ocasional, por otra parte, sí que puede ser una buena idea, sobre todo para completar la cantidad de esos alimentos recomendada y mejor si en lugar de un exprimidor se emplea una licuadora.
Conviene tener muy claro que un zumo no equivale nutricionalmente a una pieza de fruta porque carecen de la fibra que tiene la pieza entera y tampoco estimulan la masticación. Además, aunque el zumo venga de una fruta natural y lo hagamos en casa, incorporando la pulpa, los azúcares de uno y otro no son los mismos.
No hay ningún problema si los tomamos como bebida ocasional, pueden ser hidratantes y aportar, como hemos dicho, vitaminas y minerales (y en algunos casos también la fibra), pero no conviene sustituir el consumo de frutas naturales y enteras por el zumo porque supondría un exceso de azúcares porque sin darnos cuenta, en lugar de consumir una naranja, por ejemplo, estaremos tomando tres o cuatro, lo que multiplica la cantidad de azúcar sin darnos cuenta. Si sustituimos la fruta de la merienda y el desayuno por un zumo, al final del día estaremos tomando el equivalente a ocho o nueve naranjas y su azúcar correspondiente, además de todo lo demás ingerido durante el día.
Además, los zumos no resultan tan saciantes como la pieza de fruta entera, no solo por la fibra que se hincha en el estómago al mezclarse con el agua, creando sensación de saciedad, también es algo que conseguimos al masticar. Por tanto, podemos tener claro que un consumo ocasionar no es un problema, pero nunca si se emplea el zumo como sustituto de la fruta entera.
Referencias
Edulcorantes y azúcares: MedlinePlus enciclopedia médica. (s. f.-b). https://medlineplus.gov/spanish/ency/article/002444.htm