Como una auténtica estrella de cine entró Marc Cucurella al plató de La Revuelta: lanzándose en tirolina con el escenario del programa de La 1 como destino. Esa entrada fue solo el preludio del 'show' que el lateral de la selección española estaba a punto de dar ante las cámaras de RTVE.
El futbolista no dejó títere con cabeza, y el primero en caer fue Pepe Reina, a quien Maldini había recomendado a Broncano como invitado. "¿Está en activo?", se interesó el presentador. "Creo que sí, en Italia. Está de medio portero, apurando sus últimos añitos para tener más patrimonio", le respondió Cucurella, desatando las risas del público.
"Estará forrado el hijoputa. Y si no se retira...", continuó el jugador del Chelsea, que apuntó que el exguardameta del Villarreal tiene cinco hijos. "Yo tengo tres, tenemos mucho tiempo libre también. Intento ser buen padre", reconoció.
Hablando sobre sus hijos, de cinco, tres y un año de edad, Cucurella ha explicado que los dos pequeños se están criando en Inglaterra, aunque el mayor nació en Getafe durante su etapa en el club azulón. "Yo lo hice en el País Vasco para ver si me podía jugar en el Athletic, pero salió mal de timings", apuntó.
"Si no le buscan una prima, una abuela... o cosas así", bromeó el lateral izquierdo, que siguió con la broma apuntando que "a lo mejor hay alguna norma" que diga que el pequeño podría ser jugador del Athletic en el futuro gracias a que sus padres le concibieran en el País Vasco.
Llegó el momento entonces de los regalos: varias camisetas con los colores de España de edición especial para Cucurella. "Habla solo cuando tengas que decir jaque mate", rezaba una frase impresa en una de ellas. Una afirmación que recordó a Broncano a Lamine Yamal y el 'pique' con Rabiot antes de las semifinales de la Eurocopa entre la Roja y Francia.
"A Lamine no creo que se le hubiera ocurrido una frase como esa, jugando es un fiera, pero...", dejó caer entre risas el futbolista, con un 'recadito' en tono jocoso para el extremo del Barça.
El buen rollo en la selección
Cucurella también habló sobre el buen rollo en el vestuario de la selección española, aunque reveló que durante la Eurocopa "hemos tenido momentos de crisis". "Piques, muchos días juntos también. Había de todo, tensión, partidos de ping-pong", explicó el jugador, que quiso dejar claro lo unico que está el grupo.
"Mucho del éxito que hemos tenido es porque formamos un buen grupo. Daba un poco igual quién jugase, teníamos un objetivo claro que era ganar y se hizo", ha comentado, al mismo tiempo que ha desvelado que tiene un gif en su móvil de la asistencia a Oyarzabal en el gol que le dio a España su cuarto torneo continental. "Cuando estoy triste lo mando", ha bromeado.
No se libró el ex del Getafe de comentar uno de los momentos más polémicos de la Eurocopa, su mano en el interior del área durante el partido de cuartos ante Inglaterra: "Estaba cagado la verdad. Fui al árbitro rapidísimo. Él me decía que no. Estaba cagado porque ese me tenía manía un poco. Un inglés con el que había tenido piques en la liga. Me debía una. Lo revisó y... jueguen, jueguen. Yo podría haber sido la persona más odiada de toda España".
El lateral izquierdo también recordó la canción viral de TikTok con su nombre. "Ni me saludan, me la cantan ya", apuntó, al mismo tiempo que reconoció que Haaland, el delantero que menciona la letra, "es difícil de defender". "Encima jugamos el primer partido contra él, marcó, perdimos... fue duro", ha añadido. Y ha revelado que uno de los jugadores más difíciles de defender para él había sido Dembélé.
Antes de marcharse, Cucurella también respondió a las preguntas clásicas: "Entre 10 y 20 de patrimonio", reconoció el jugador, cuestionado por Broncano tras apuntar que su sueldo ronda los cinco o seis millones por temporada.
"Me han dicho que si contesto, el próximo mes sequía. Venga voy a contestar, me la juego. Tengo tres hijos, los suegros en casa, que están ahí ayudándonos, bueno, molestando-ayudando, depende del día. Dos semanas ahora con la selección. Eso son medios. Voy a decir, entre siete y 10", señaló el catalán respecto a la pregunta del sexo.
