El canciller alemán, Olaf Scholz, presentó este miércoles una moción de confianza ante el Parlamento, que se votará el próximo lunes y que allanará el camino a unas elecciones generales anticipadas el próximo 23 de febrero. "Con este paso quiero allanar el camino a unas elecciones anticipadas al Bundestag", escribió el político socialdemócrata en su cuenta de la red social X junto a una fotografía en la que se le ve firmar el documento que ha enviado a la presidenta de la Cámara Baja, Bärbel Bas.
Tras la ruptura de la coalición tripartida formada por liberales, verdes y socialdemócratas el pasado 6 de noviembre, el Gobierno de Scholz ya no tiene mayoría en el Parlamento, por lo que se da por seguro que el canciller perderá la moción de confianza. Una vez se vote la moción y la mayoría del Parlamento le niegue la confianza al Gobierno, el presidente de Alemania, Frank-Walter Steinmeier, tendrá 21 días para disolver la Cámara Baja y convocar formalmente nuevas elecciones que tendrán que realizarse en el curso de los siguientes 60 días. Ese calendario coincide con el pacto alcanzado por los principales partidos de que los comicios generales se celebren el 23 de febrero.
Scholz, tras presentar la moción, pidió en una declaración ante los medios a los partidos democráticos trabajar para aprobar varias medidas pendientes antes de las elecciones, a fin de evitar que los ciudadanos tengan que soportar más cargas fiscales y para que puedan favorecerse de beneficios que estaban planificados pero todavía no aprobados por la Cámara Baja. "Hasta las elecciones el Gobierno y el Parlamento mantendrán sus competencias y tenemos que tomar decisiones por responsabilidad con los ciudadanos", dijo Scholz.
Concretamente, dijo que debía aprobarse el aumento del subsidio por hijo, la corrección de la llamada "progresión fría" -para evitar que una combinación de alzas salariales y el aumento de la inflación produzcan una pérdida de la capacidad adquisitiva- y una ley destinada a estabilizar los precios de la energía. También quisiera ver la prolongación de los subsidios al billete alemán para los trenes de cercanía. "Todas esas medidas para una familia normal pueden representar entre 80 y 100 euros al mes", argumentó el canciller. Recordó que el dinero para todas esas iniciativas está disponible y que sólo falta la aprobación de la Cámara Baja.