La economía española volvió a mantener durante el primer trimestre de 2024 un ritmo gradual de crecimiento, con un aumento del 0,7% del PIB. Sin embargo, a pesar de las favorables previsiones, cada vez salen adelante menos proyectos empresariales de los que deberían activarse.
"Hay dinero para financiar, pero debe haber mayores facilidades a la hora de abordar dichas iniciativas empresariales", ha señalado César Pontvianne, presidente de Iberaval, la Sociedad de Garantía Recíproca (SGR) líder del sector en nuestro país, en un desayuno informativo al que ha acudido 20minutos.
Según Pontvianne, "es crucial que se restablezcan vías de financiación para que las pymes puedan impulsar su desarrollo y contribuir al dinamismo económico". Asimismo, explica que los créditos ICO, "fueron una solución efectiva, pero ahora vemos que muchas de aquellas empresas han fundido sus reservas y ya se ven abocadas a liquidar su remanente".
En este sentido, el presidente salmantino ha destacado que el cierre del crédito, los altos tipos de interés y las exigencias fiscales han dificultado el acceso a la financiación de las pymes, limitando sus operaciones, inversiones y crecimiento.
Según recoge el último Informe de Financiación de la Pyme en España de CESGAR, el elevado coste de la financiación debido a los altos tipos de interés ha condicionado el 46,9% de las operaciones financieras de las pymes españolas. Tal sería la subida de tipos que, en los últimos años, Iberaval habría ampliado su nicho de clientes a las medianas y grandes empresas, a las que también los bancos serían, en ocasiones, reacios a conceder créditos.
Aun así, el compromiso de Iberaval con la financiación de las pequeñas empresas y los autónomos ha crecido anualmente hasta duplicarse, pasando de 298 millones de euros en 2018 a 607 millones de euros en 2023.
Y es que esta entidad mutualista que cuenta con 38.000 socios -en total, hay 175.000 en el sector-, de los cuales el 36% son socios protectores o institucionales, se dedica a facilitar el acceso a la financiación de bancos y otras entidades de similar naturaleza a este tipo de empresas mediante avales o préstamos con mejores condiciones, ya sea, por ejemplo, con plazos más largos de devolución.
Pontvianne ha destacado la "falta de cultura financiera" de las pymes españolas y la necesidad de que estas empresas apuesten por disponer de recursos para evitar problemas financieros. "Muchos pequeños empresarios desconocen la diferencia existente entre contabilidad y finanzas", argumenta.
Además, el plazo medio de nuevos préstamos se ha acortado en España a raíz de la pandemia y, en este sentido, Iberaval sostiene que las pymes "deben apostar por alargar los plazos de devolución de sus préstamos".
Otro de los motivos por los que las empresas afrontan dificultades para financiarse se relaciona con que existan "demasiadas exigencias" fiscales. Una "burocracia excesiva" que, muchas veces, supone un mayor coste para las empresas, según explica el presidente de Iberaval.
"Es clave también apoyar a las pymes en su camino hacia la IA, porque la Unión Europea está liderando este campo, pero no basta con legislar, hay que dar los mecanismos para que las pequeñas empresas, sobre todo, puedan ir adaptándose a este asunto", concluye Pontvianne.
Desde la pandemia, ha aumentado en un 1,5% el número de pymes, lo que suponen 8.700 empresas nuevas al año para un país de casi 48 millones de habitantes. En total, según el Informe de la Pyme en España del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, el número total de empresas pequeñas y medianas asciende a las 2.936.243.
