La buena salud articular pasa demasiado desapercibida pese a que es la clave para una tercera edad en plena forma. Nos acordamos de articulaciones y huesos principalmente por lesiones o cuando empiezan a fallar por alguna razón. En prácticas consolidadas en España como el pilates, el ejercicio se complementa con las fitball, pero también se usan para ejercicios concretos. ¿Cuáles son los mejores?
Esta pelota de grandes dimensiones, fitball, está vinculada a prácticas específicas como la fisioterapia y rehabilitación de suelo pélvico o preparación al parto. Su mayor característica es su gran dimensión ya que su diámetro varía entre los 35 y los 85 centímetros. Si el fortalecimiento de articulaciones se quiere hacer en casa y para ello hay que adquirir la pelota, es importante tener en cuenta la altura de la persona, así que mejor probarla en el establecimiento.
Si la práctica es en casa, también es importante que la pelota cuente con la cantidad de aire necesaria porque eso influirá directamente en la posición que irá adquiriendo el cuerpo durante la sesión, correcta o incorrecta. Es conveniente que sea de un material de calidad para evitar riesgos innecesarios como que se desinfle en pleno ejercicio y provoque lesiones de gravedad.
1. Ejercitar las extremidades
En el caso de preferir una pelota de menores dimensiones, bien por comodidad bien por problemas de espacio para la práctica en casa, puede dar juego igualmente que una grande. Para un primer ejercicio sencillo se necesitaría también una colchoneta y consiste simplemente en sujetar la pelota entre las manos simultaneando con la flexión de rodillas hacia la derecha e izquierda de forma alterna.
2. Fortalecer los hombros
Con la espalda sobre la fitball y las rodillas creando un ángulo de 90 grados con el suelo, se elevan los brazos hacia el techo procurando que estén en línea con el cuerpo. Podemos sostener una pelota pequeña. Las repeticiones se hacen cada diez segundos.
3. Fortalecer caderas, rodillas y tobillos
En una esterilla, se necesita estar tumbado hacia arriba apoyando los pies en la fitball en el punto adecuado para darnos la mayor estabilidad posible. Se elevan los glúteos y la parte baja de la espalda, basculando la pelvis. Aguantar la posición durante 20 segundos, descansar y repetir.
4. Ejercitar la espalda
Con la espalda apoyada totalmente en la fitball, dejando los glúteos a pocos centímetros de la esterilla, avanza pequeños pasos mientras la pelota va hacia atrás. El balanceo se complementa con la elevación de brazos, siendo muy importante evitar movimientos bruscos.
5. Trabajar abdominales y extremidades
Boca arriba en la esterilla con las piernas extendidas y brazos estirados, se coge el balón con las manos intentando pasar la fitball de las manos a los pies y volver a la posición inicial.